El Supremo pide la mediación del Rey para que se apruebe el Estatuto del Magistrado
Las de sesenta magistrados del Tribunal Supremo reunidos en asamblea acordaron ayer, por unanimidad, pedir al presidente del Tribunal Supremo, Javier Delgado Barrio, que se dirija al presidente el Gobierno o a quien considere conveniente para desbloquear la aprobación parlamentaria del nuevo Estatuto del Magistrado, que asimilaría en sueldos a los magistrados del Supremo con los del Tribunal Constitucional. Alternativamente, y por si tal gestión no diese resultado, la asamblea solicita la mediación del rey don Juan Carlos.
Miembros de la comisión encargada, de la elaboración del Estatuto del Magistrado informaron ayer a la asamblea de la paralización en el Congreso de los Diputados de la asimilación retributiva de los magistrados del Supremo a los de los altos órganos jurisdiccionales del Estado, es decir, el Constitucional. Las fuentes informantes responsabilizan al presidente del Constitucional, Alvaro Rodríguez Bereijo, de haber conseguido que los grupos parlamentarios no aprobaran la semana pasada la enmienda que equipararía en sueldos a unos magistrados con otros. La mayoría de los 65 integrantes de la asamblea mostró su indignación por esa supuesta intervención de Bereijo.El proyecto de modificación de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que amparaba esta equiparación, fue devuelto por el pleno de la Cámara a la Comisión de Justicia de la misma al haberse registrado sólo 169 votos a favor, 15 en contra y 139 abstenciones.
Tras una amplia deliberación sobre las alternativas a seguir, los magistrados del Supremo acordaron ayer por unanimidad pedir a su presidente, Javier Delgado, en funciones de presidente del Tribunal Supremo y al margen de su cargo de presidente del Consejo General del Poder Judicial, que intervenga ante el presidente del Gobierno, o el de las Cortes, para conseguir que se vote aquella disposición, y entretanto, que mediante una disposición transitoria se equiparen las retribuciones con cargo a los Presupuestos de 1998.
Alternativamente, la asamblea acordó que Delgado dirija un escrito al Rey solicitando su mediación. Los alineados con el sector más progresista perdieron por amplia mayoría cuando expresaron sus reticencias a invocar la mediación de don Juan Carlos.
No es un caso sin precedentes. Los magistrados de la Sala de lo Civil acordaron dirigirse al anterior Consejo del Poder Judicial para instar la mediación del Rey en un conflicto con el Constitucional en el que los magistrados del Supremo apreciaban una invasión de sus atribuciones. Pero el Consejo paró la iniciativa. El primer intento de mediación real por parte de los jueces lo protagonizó la Asociación Profesional de la Magistratura. La APM llegó a solicitar una audiencia real que quedó sin respuesta.
