La cornisa cantábrica registra el menor aumento de renta 'per cápita' en España

Los habitantes de la cornisa cantábrica son los que menos incremento han experimentado en su renta per cápita desde 1960, según el informe sobre la distribución de la renta nacional publicado por la Fundación BBV que analiza los últimos 36 años. Cantabria (con un crecimiento del PIB por habitante del 2,51%), Asturias (2,77%) y el País Vasco (2,52%) presentan índices de aumento muy inferiores al 3,67% de la media nacional para ese periodo. Las islas Baleares y las Canarias son las comunidades que han tenido un mayor índice de desarrollo.

Las economías de estas tres comunidades autónomas presentan también un crecimiento inferior a la media. Baleares y Canarias presentan los mayores índices de desarrollo económico y de incremento de la renta por persona. La crisis energética, que arranca en 1973, pero que en España no tiene incidencia hasta 1975, provocó una fuerte herida en algunas comunidades autónomas muy industrializadas de la que aún se duelen. Las economías del País Vasco, Asturias y Cantabria, que entre 1960 y 1975 registraban fuertes crecimientos económicos -del 6,97%, 5,47% y 4,50%, respectivamente-, se sumieron en una etapa de debilidad en la década siguiente que no pudo ser compensada por la mejoría experimentada en los últimos años. En consecuencia, y pese a que desde 1975 su población apenas experimenta crecimientos, su índice de PIB por ha bitante registra un considerable descenso.

En el País Vasco, la renta per cápita ha pasado de suponer el 168,04% al 112,37%. A pesar de la caída de 55,6 puntos, su i1ndice aún está por encima de la media. Sin embargo, Asturias y Cantabria, que en 1960 tenían una renta per cápita superior al promedio español -117,9% y 136,35%-, ahora se sitúan por debajo. En Asturias, el índice es del 85,95%, y en Cantabria, del 90,68%.

La mayor subida

Una situación contraria han vivido los habitantes de las islas Baleares y Canarias, donde más ha subido la renta per cápita en los últimos 36 años, exceptuando Ceuta y Melilla. Y ello a pesar de los fortísimos incrementos registrados en su población, del 70,3% y 66%, respectivamente. La expansión económica (te las islas ha sido espectacular. El PIB balear se ha multiplicado por 8,2 y el canario por 7,9 frente al 4,7 del conjunto español.Castilla-La Mancha es la tercera comunidad autónoma que registra el mayor incremento en el índice de renta per cápita, pero en este caso se debe, más que a su desarrollo económico, al descenso en un 16,5% en su número de habitantes. A lo largo de los últimos 36 años, el efecto demográfico provoca que comunidades autónomas como ésta, cuyas economías crecen por debajo de la media, registren importantes ascensos en el nivel de riqueza por habitante, superiores al conjunto español. Ocurre también en Castilla y León, donde la población se reduce un 13,14%, y en Extremadura, que con un crecimiento del PIB un punto inferior al conjunto, registra una incremento de la renta per cápita del 4,12%, 0,45 puntos por encima del promedio. En esa comunidad autónoma la población ha caído desde 1960 un 24,40%.

El efecto demográfico ha provocado también el efecto contrario. Es decir, se ha registrado una evolución del PIB por habitante inferior a la media española a pesar de haber crecido la economía por encima del conjunto de España. Son los casos de Cataluña y Valencia -donde la población se ha incrementado un 56,75% y un 58,99%, respectivamente- y de Madrid, donde el número de habitantes casi se ha duplicado.