El edil de Cultura quiere que el Teatro de Madrid sea para la danza

Un teatro para la danza gestionado por las tres administraciones (Central, autónoma y municipal). Esta es la solución que prefiere el concejal de Cultura, Juan Antonio Gómez Angulo (PP), para el Teatro de Madrid, privatizado por el Ayuntamiento hace tres años y a punto de concluir ahora su etapa bajo la gestión de la empresa Madrid Género Lírico.Esta sociedad recibió la adjudicación del local por un periodo de tres años, durante los que ha recibido una ayuda municipal de 100 millones de pesetas anuales. Este periodo de concesión concluyó el pasado enero, pero se concedió una prórroga de seis meses, que continúa vigente.

Por eso va siendo hora de que los responsables municipales se replanteen las perspectivas del teatro. Según el concejal de Cultura, la futura explotación de esta sala admite dos opciones: llegar a un acuerdo con el Ministerio de Cultura y la Comunidad para que sea el teatro de la danza y así Madrid tendría un local para la ópera, otro para la zarzuela y otro para el baile, o volver a sacarlo a concurso "puro y duro".

En el caso de que el gobierno municipal opte por una segunda privatización de la gestión del teatro, según Gómez Angulo, la ayuda del Ayuntamiento sería sensiblemente revisada a la baja. De entre las dos posibilidades, el responsable de Cultura prefiere la primera.

Lo único seguro respecto al teatro -situado en La Vaguada- es que durante los meses de verano cerrara sus puertas para que se ejecuten en él unas "obras inaplazables", según Gómez Angulo. Entre otros proyectos, los responsables municipales piensan revisar el sistema de ventilación. "También estudiaremos una ampliación de las instalaciones básicas del teatro, lo que podría cambiar el carácter del mismo. Analizaremos si nos compensa ampliar el patio de butacas para que albergue un tipo de espectáculos grandes, como musicales", expone Gómez Angulo.

ReversiónLa oposición, por su parte, tiene muy claro lo que prefiere para este teatro: que vuelva al Ayuntamiento. Y dice también que la decisión se tenía que haber tomado ya. "Apostamos por que el teatro revierta al Ayuntamiento. Que cubra el hueco en el ámbito de la danza, sin desechar otras cosas", expone el concejal socialista Rafael Simancas.

"Rechazamos la posibilidad de que vuelva a salir a concurso para explotarlo de forma privada. En Madrid hay déficit de instalaciones culturales. Y nos extraña que quieran acogerse a una gestión tripartita, porque siempre han criticado esa fórmula. Más bien parece una dejación de responsabilidad", añade Simancas. Tampoco entiende por qué tiene que cerrar el teatro durante el verano. "Las obras se tenían que haber previsto antes. Los Veranos de la Villa no van a poder contar con este teatro", señala.