Clemente rechaza una oferta de 200 millones y seguirá , en la selección cobrando 80

La Federación de Fútbol cerró el miércoles, en Rotterdam (Holanda), con Javier Clemente las cantidades que cobrará el seleccionador por la renovación de su contrato dos años más, hasta el 2000. El acuerdo establece 80 y 85 millones de pesetas, respectivamente, por cada uno de esos dos años, aparte de las primas, que son el doble de las que perciben los jugadores. Los dirigentes federativos han acelerado la renovación del contrato actual que finaliza el 30 de junio de 1998 ante el interés del Valencia por fichar a Clemente, al que llegó a, ofrecer 200 millones por año.

Juan Padrón, vicepresidente económico de la Federación, y su secretario general, Gerardo González, aprovecharon el miércoles su presencia en Rotterdam, con motivo de la final de la Recopa entre el Barcelona y el París Saint Germain, para reunirse con el seIeccionador, que también asistió al partido, y cerrar las condiciones económicas de su renovación. Los dirigentes federativos tienen previsto redactar el martes el correspondiente compromiso para su firma y después hacer públicas las cifras. La Federación, como sucediera en anteriores renovaciones, ofreció a Clemente un incremento de cinco millones de pesetas por año, aumento que el técnico asume como lógico "por tratarse del aumento oficial del coste de la vida". Clemente se estrenó en el cargo en la temporada 1992-93 cobrando 50 millones de pesetas por temporada. El seleccionador, además, percibe primas, en función de los resultados y así la clasificación de España Para el Mundial de Francia 98 puede suponer más de 30 millones de pesetas para Clemente.

"El presupuesto de la Federación no está en condiciones de pagar mayores cantidades. Tampoco podemos entrar en puja con algunos clubes y, en este sentido, es de agradecer la postura de Clemente", manifestó Juan Padrón.

El seleccionador, a pesar de su cotización, no consideró necesario incluir en su contrato cláusula alguna que permita rescindirlo si se decide a aceptar alguna de las suculentas ofertas de clubes que le llegan desde hace años. "Las cláusulas, las pone la Federación y yo confío en ella", indicó Clemente.

Javier Clemente, que ayer se encontraba en Palma de Mallorca para dar una conferencia, rechazó que sea un entrenador barato. "Es el precio que tengo", fue la justificación del seleccionador que prefirió no entrar a considerar el ofrecimiento que hace un par de meses le hizo el Valencia. El club que preside Francisco Roig estaba dispuesto a pagar unos 200 millones de pesetas por temporada. La oferta inquietó a los dirigentes federativos y colocó en una difícil situación a Clemente, abocado a dar una respuesta .

El seleccionador, durante su última cita con el equipo nacional, el pasado mes con motivo del partido Yugoslavia-España, llegó a replantearse su futuro y, habló del síndrome que a veces tiene del trabajo diario que requiere un equipo. Al final dio el sí a la opción federativa.

El seleccionador restó importancia a esos titubeos y aseguró: "No he tenido más dudas que otras veces, pero sí me ha sorprendido que mi renovación se haya plasmado con tanta antelación. Mi contrato finaliza en junio de 1998 y confiaba en que hasta marzo de ese año no se hablase del asunto". Los dirigentes federativos se han visto obligados a acelerar la operación después de que el presidente del Valencia pidiese permiso a la Federación para entrar en contacto con Clemente y conocer sus planes una vez finalizase su actual contrato el 30 de junio de 1998.