El sargento de Jaca ya fue condenado por matar a otro militar en 1984

El sargento Juan Carlos Miravete Duque, en prisión preventiva por la muerte del cabo de reemplazo Samuel Ferrer Caja, quien recibió un disparo en el pecho el pasado viernes por la noche en el destacamento de Candanchú (Huesca), ya mató a otro militar en circunstancias parecidas. Fue en septiembre de 1984, en el batallón de Sabiñánigo (Huesca), cuando Miravete disparó su pistola contra otro suboficial. La sentencia le condenó "por manipular, con ánimo de broma, el arma que portaba tras haber ingerido bebidas alcohólicas y en la presencia de un compañero que resultó muerto". La pena a que fue condenado, un año de cárcel, no incluyó el ingreso en prisión. Además, siguió en el Ejército y fue destinado al cuartel de Jaca, del que depende el destacamento de Candanchú.

Los soldados del destacamento de Candanchú que comparecieron ayer ante el juez de Jaca que investiga la muerte del cabo Ferrer explicaron que el sargento se había bebido una botella de pacharán en las horas previas a los trágicos sucesos del pasado viernes.