La clásica biblioteca de un izquierdista
La biblioteca de Gary Siemund tiene unos 300 libros. El conjunto constituye el paradigma perfecto de una antología para el uso de todo izquierdista alemán que se precie: desde las obras escogidas de Marx y Engels a abundante literatura sobre la revolución en Centroamérica.
En el minúsculo apartamento de Siemund, todo da la impresión de vida cotidiana. Nada que ver con un piso franco semiabandonado. Es una vivienda usada, con un cuarto de estar y una cocina, en la que llama la atención un viejo ordenador encima de la mesa empotrada donde se suelen sazonar los alimentos.
En el pasillo de la entrada hay un sobre remitido por la marca de gasolina Aral. Siemund se ganaba la vida con trabajos ocasionales de gasolinero en una estación de servicio de esa marca situada a la salida de Wiesbaden.
La biblioteca está en el cuarto de estar-dormitorio de la vivienda. Una biografía de Sandino, Abril en Nicaragua, iViva Sandino!, un libro del ex-vicepresidente de Nicaragua y escritor Sergio Ramí-rez, un libro en español titulado Del pueblo a la ciudad y otro titulado El Salvador son algunos de sus títulos. También, como no, una biografía del Che Guevara, al lado de otro libro de este autor, en inglés, El hombre nuevo.
En una larga fila aparece una colección amplia de una compilación alemana sobre los tiempos del nazismo: Informaciones procedentes del Reich. Al lado, libros que parecen más bien de divulgación escolar: biografías de descubridores, Marco Polo y Cristobal Colón entre ellos. No podían faltar las obras escogidas de Marx y Engels y un texto de Trotski sobre Lenin. También hay una colección de revistas sobre temas de cibernética.
En la cocina reina el desorden, con libros y ropa amontonados por el suelo. En la mesa, junto al ordenador, un cenicero lleno de colillas.
En la entrada de la casa ya no aparece el nombre de Renate Heike Schubbert en el buzón. La madre de Siemund mandó al casero que retirase el nombre de la chica, a la que atribuye el mal camino emprendido por su hijo.
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