CC OO ilustra con fotos el descuido de los parques con jardineros privados

La lucha entre los partidarios de lo público y lo privado ha alcanzado a las zonas verdes de Madrid. La central sindical de CC OO en el Ayuntamiento ha respondido a las ansias privatizadoras del gobierno municipal del PP (que se niega a contratar nuevos jardineros para cubrir las jubilaciones) con un informe, fotografías incluidas, sobre la "deficiente" situación de los parques cuidados por las empresas particulares (la mitad del total).

Entre las críticas, el sindicato subraya: las empresas privadas que cuidan los parques públicos no dedican el personal previsto en las condiciones de la concesión: parte de los trabajadores son empleados en otros compromisos (por lo que se pagaría varias veces por el mismo operario); falta profesionalización en las plantillas, por despidos y sustituciones con personal sin experiencia.Todos son males que, según el sindicato, afectan a este servicio y se traducen en una sentencia: los parques gestionados directamente por el Ayuntamiento están en mejores condiciones que los atendidos por las privadas. Conclusión ilustrada con varias fotografías que chocan con las obligaciones de las empresas. Jardineras con plantas secas, montones de residuos vegetales, malas hierbas en el centro de los caminos de tierra, suciedad en zonas infantiles, setos secos y sin continuidad... "Las empresas dispondrán de contenedores, deben conservar paseos terrizos, deben conservar los usos para juegos", recuerda CC OO junto a las fotos.

Una de las empresas negaba ayer los hechos y calificaba de "exageración" las manifestaciones del sindicato. Para ella el nivel de calidad es "el suficiente y adecuado"; en todo caso, no inferior al que resulta en los parques públicos.

1.957 hectáreas

Los jardineros privados tienen en sus manos 1.957 hectáreas, que incluyen el total de las jardineras y árboles de alineación de la ciudad. Las otras 1.998 de la ciudad (la Casa de Campo, los parques de El Retiro, de la Fuente del Berro y del Oeste, además de los viveros municipales) dependen directamente del Ayuntamiento. El municipio dictó unas normas de juego que recogen los trabajos que deben realizar las compañías. Ocho empresas se reparten presupuesto y diez zonas de Madrid. Ocho sectores urbanos de esas diez zonas son controlados por las juntas de los 21 distritos.Las otras dos zonas, con áreas singulares (como el Parque Lineal del Manzanares, el de Alameda de Osuna, los bordes de la M-30 o el eje de Paseo del Prado y la Castellana), están vigiladas directamente por el Departamento de Parques y Jardines del Ayuntamiento. Su jefe, Santiago Romero, explica: "A las empresas privadas les resultaría muy fácil hacer una contranota, con fotografías sobre el mal estado de los jardines que cuidan los funcionarios del Ayuntamiento".

Sin embargo, Romero da la razón a los sindicatos en que el personal contratado por los privados es menos cualificado. Pero a favor de los privados está el mayor rendimiento, el menor coste y la superior operatividad.

En cuanto al llamado prestamismo laboral, Santiago Romero habla de las dos zonas bajo su supervisión: "No sólo no hay menos personal, sino todo lo contrario; en Recoletos-Castellana tenemos un 10% más de operarios por petición nuestra, porque vimos que era necesario". Su departamento exige el cumplimiento de las condiciones pactadas "a rajatabla".

Este periódico intentó, sin éxito, ponerse en comunicación con el concejal de Medio Ambiente, Adriano García-Loygorri, para conocer su versión.

Las denuncias, de años, dicen en CC OO, han caído en saco roto. Y, aún más, el Ayuntamiento pretende seguir privatizando: su próximo objetivo podría ser el parque del Oeste, en el distrito de Moncloa. Romero reconoce que tiene poco personal para la correcta conservación de este parque: ahora el concejal del área debe decidir si se piden más operarios municipales o si se privatiza su gestión.

Esta política de privatización se inició cuando los socialistas gobernaban el Ayuntamiento de Madrid. El lema era: "Mejor servicio y más barato". Hoy el sindiato propone otro: "Peor servicio y más caro". CC OO concluye que el empleo público es más económico.

Los 776 trabajadores con que en teoría deberían contar las empresas como personal municipal supondrían un coste salarial de unos 2.350 millones de pesetas. Muy lejos de los 3.300 millones que el Ayuntamiento destina a los privados. Santiago Romero asegura que el mantenimiento de las zonas verdes por empresas privadas cuesta entre el 30% y el 40% menos que el municipal. La explicación está, fundamentalmente, en la diferencia de salario en favor de los funcionarios.