Aznar visita la División Brunete, la más potente unidad del Ejército

Una densa nube de polvo envolvió ayer al presidente del Gobierno, José María Aznar, en el campo de maniobras de El Goloso (Madrid), donde asistió a la exhibición protagonizada por 230 vehículos, entre ellos 88 carros de combate, y 1.038 militares de la Brigada de Infantería Acorazada Guadarrama XII, integrada en la División Mecanizada Brunete.Era la primera vez que Aznar, que no ha realizado la mili, acudía a una unidad del Ejército de Tierra. Anteriormente había visitado la base aérea de Zaragoza y la base naval de Rota (Cádiz). Ayer prometió que sus visitas a instalaciones militares serán "no habituales, pero sí periódicas" para "conocer de primera mano las necesidades y la evolución de las Fuerzas Armadas".

En unas breves declaraciones a los periodistas, tras las que no admitió preguntas, el presidente se mostró "extraordinariamente satisfecho" de la tarea que cumplen los ejércitos, tanto en España como en el extranjero, y aseguró que el Gobierno está "muy pendiente" de su situación ante el "espectacular proceso de transformación" al que se enfrentan y los retos que suponen tanto la integración total en la OTAN como la profesionalización total de sus efectivos.

No olvidó, sin embargo, advertir de las "limitaciones presupuestarias" que tiene el Gobierno a la hora de acometer los costosos programas de armamento.

"Pizarro" y "Leopard"

Aznar se colocó para hablar delante del prototipo del Pizarro, un blindado de fabricación española del que el Ejército adquirirá 463 unidades por 124.000 millones de pesetas. Posteriormente, se cubrió con un chaquetón y una gorra de campaña para subir al vehículo. "Hay un poco más de cabeza que de gorra", comento irónicamente.El otro protagonista de Ia visita fue el carro de combate Leopard 2 cuya adquisición está negociando España con Alemania tras haber recibido 108 unidades en régimen de alquiler.

Los mandos militares no tuvieron que esforzarse mucho para demostrar al presidente que las prestaciones del carro alemán son muy superiores a las del M-60 norteamericano con que actualmente cuenta la brigada. El jefe de la división, el general José Ramón Lago, le regaló una reproducción del Leopard como símbolo, según dijo, de "potencia y modernidad".

Aznar inició la visita pasando revista, a bordo de un Nissan descubierto, a la formación de blindados, acompañado por el ministro de Defensa, Eduardo Serra y el jefe del Estado Mayor del Ejército, el teniente general José Faura, y la concluyó compartiendo un cocido con 150 militares en el comedor del cuartel.

También Felipe González inició su mandato, en noviembre de 1982, visitando la División Brunete, la unidad más potente del Ejército de Tierra, aunque en circunstancias bien distintas, pues ETA acababa de asesinar a su jefe, el general Lago Román.