Djordjevic deja huérfano al Barça en Bolonia

Lo mismo que da, quita. Y en Bolonia, en el feudo de su antiguo equipo, Djordjevic dejó huérfano al Barça. Tuvo su día negro, tanto durante el desarrollo del partido como en los instantes decisivos. Buscó un triple imposible, ante los brazos de Murdock y Myers, cuando faltaban nueve segundos. Una acción que le hubiera dado al Barça la prórroga y la ascendencia sobre un partido en el que llegó a sumar 16 puntos de desventaja.Es el sino de contar con un jugador tan genial como Djordjevic. De hecho, pese a su negro día, aún estuvo a punto de redimir a su equipo con cinco puntos consecutivos que dejaron a los azulgrana a tiro de piedra, 64-62. Pero en el último instante falló como lo había hecho el resto del partido.

Ambas, escuadras llegaron a temer tanto al abismo como a atisbar algún botín de valor en una primera parte sin dueño. Murdock y Myers mantuvieron al Teamsystem mientras que Rivas y Karnisovas con oportunísimas ayudas de Andreu y sus rebotes ofensivos.

El equipo boloñés, además, se atragantó con una defensa en zona pero fue sólo en una fase muy corta del partido en la que Aíto le dio minutos a Salva Diez para liderar el esfuerzo de retaguardia. Sin embargo en el aspecto ofensivo no mantuvo los mínimos el Barcelona con una aparición en escena muy tímida de Dueñas.

La defensa del Teamsystem trabajó a destajo sobre Djordjevic. Temía mucho el equipo italiano a su antigua figura. El jugador serbio pagó las consecuencias con un parcial muy pobre en sus lanzamientos, uno de siete en el primer tiempo, y el cuidado del balón fue impropio del equipo azulgrana con 16 pérdidas nada más empezar el segundo tiempo y cuatro minutos seguidos sin anotar. Fue entonces cuando el grupo azulgrana, que no tuvo a quién agarrarse, estuvo contra las cuerdas. El Teamsystem encontró la brecha que buscaba: 49-33.

Hasta que la escopeta de Karnisovas no dio en el blanco no reencontró la esperanza el Barcelona: 57-53. Pero ayer, Djordjevic no fue lo resolutivo que en él es habitual y el Barca lo pagó.

En otros partidos de cuartos de final: Efes Estambul, 87; Villeurbanne, 71. Panathinaikos, 49; Olympiakos, 69. Stefanel de Milan, 94; Olimpia Liúbliana, 90.