El turista retenido en Cuba achaca el caso a la descoordinación entre jueces y policía

Jesús Martín, el turista de 30 años que fue detenido en Cuba y cuya situación originó una crisis diplomática entre Madrid y La Habana, regresó ayer a España después de tres semanas en la isla. Martín, que se mostró sorprendido, por la expectación que ha producido su caso, achacó el incidente al "nulo entendimiento" entre los jueces cubanos, que querían enviarle a España, y la policía de la isla, que le negó la salida.

"En vez de los diez días previstos de vacaciones, he pasado tres semanas. Pero no he podido disfrutar nada". Jesús Martín, el vecino de Leganés (Madrid) que fue detenido en La Habana el 2 de marzo tras sufrir un accidente de tráfico, regresó a España desde Cuba. Martín achacó el asunto al "nulo entendimiento entre la policía y los jueces cubanos".Su situación causó un incidente diplomático entre Madrid y La Habana. El ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, llegó a plantear la posibilidad de recomendar a los turistas españoles no visitar la isla. Su homólogo cubano, Roberto Robaina, calificó a Matutes de "chantajista y mentiroso". En Bruselas, el propio Matutes aseguró que el incidente, "afortunadamente superado", no debe dificultar "unas relaciones correctas" entre los dos países.

El presidente de la Federación Española de Agencias de Viajes, Jesús Martínez, declaró a Europa Press que el incidente ha sido "un acto de promoción enorme para Cuba, que lo va a notar en un futuro inmediato".

Pasadas las dos y media de la tarde, Jesús Martín se encontró por sorpresa en el aeropuerto de Barajas con casi medio centenar de periodistas. Desconocedor del revuelo que ha provocado su caso, Jesús valoró la actuación del Ministerio de Asuntos Exteriores, y explicó que aunque al principio no le hicieron, "mucho caso" en la embajada española, al final "se han portado de forma fabulosa". La embajada le prestó los 500 dólares (unas 70.000 pesetas) que se le exigieron como fianza.

"En ningún momento sentí miedo", afirmó, "aunque estaba desesperado. No tenía dinero, no sabía como iba a terminar todo y no recibía ayuda de nadie". Jesús, empleado de Telefónica, que fue puesto en libertad el jueves, aplazó su regreso porque la compañía con la que volaba sólo tiene tres viajes semanales "y no tenía dinero para comprar otro billete".

Jesús Martín, que destacó que el trato recibido de la policía de Cuba fue, siempre bueno, deberá volver para asistir al juicio por el accidente, en el que resultó herida una mujer, aunque desconoce cuándo se celebrará. "Me han hablado de cuatro meses, de seis, e incluso de un año", afirmó. Era la primera vez que viajaba a Cuba.