Anguita dice que esta "sintonía" con Arzalluz sobre el tema de la violencia

El apretón de manos entre el presidente del Partido Nacionalista Vasco (PNV), Xabier Arzalluz, y del coordinador general de Izquierda Unida (IU), Julio Anguita, en la sede peneuvista en Bilbao fue presentado por ambos dirigentes como un intento le convertir el tradicional desencuentro entre ambas formaciones en un primer paso para "sintonizar lenguajes" en palabras de Anguita. El asunto de la violencia terrorista también estuvo encima de la mesa; Anguita aseguró que, pese a los "matices" que habrá que discutir en cada momento, "hay una voluntad y una sintonía bastante amplia" en cómo encauzarla.

Ambos líderes hicieron hincapié en la necesidad de apoyar con firmeza el Estado de Derecho en España frente a los "nubarrones" que según Arzalluz periódicamente se ciernen sobre la legalidad democrática española.Preguntado Anguita sobre la posibilidad de sintonizar también con el documento aprobado recientemente por el PNV -en el que se defiende la negociación entre ETA y el Estado-, el coordinador general de IU dijo que en cuanto al "acercamiento a resolver los problemas que hay en Euskadi, dentro de la búsqueda de diálogo en función del mantenimiento y profundización del Estado democrático, hay bastantes aproximaciones".

El encuentro de ayer en Sabin Etxea (la sede peneuvista en Bilbao) fue la primera reunión oficial. y formal que han mantenido ambos líderes y a ella le seguirá un trabajo de aproximación entre los portavoces en el Congreso de los Diputados, Iñaki Anasagasti y Rosa Aguilar, presentes también ayer en el encuentro en la capital vizcaína.

La entrevista, según indicaron fuentes de IU, había sido cocinada previamente por los portavoces de ambas formaciones en el Congreso de los Diputados. De hecho, Arzalluz y Anguita se conocieron personalmente en el funeral en Madrid de la líder histórica comunista Dolores Ibarruri, Pasionaria. Anguita ofrecerá hoy un mitin en Bilbao en la fiesta de celebración del X aniversario de IU en el País Vasco.

En esta ocasión, Arzalluz mostró su rostro más amable y moderado, tal vez por la necesidad que tiene la formación de Arzalluz de tejer otras redes de entendimiento y colaboración parlamentaria en Madrid ante la ofensiva abierta contra el PP y, sobre todo, contra el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja. Atrás quedaban los discursos incendiarios de mítines de campaña, electoral o de fines de semana en alguna inauguración de batzoki (sede social del PNV) en los que el líder nacionalista criticó con dureza la figura del coordinador general de IU y su "comunismo trasnochado". Arzalluz aseguró al término del encuentro, que duró una hora, que la visita había sido agradable, "nos honra" y era el "comienzo de una relación".

Con todo, el presidente del PNV tuvo tiempo para ironizar indicando que no es que su partido se haya convertido al leninismo por no comulgar, al igual que Anguita, con "los grandes mercados, los grandes movimientos económicos y el neoliberalismo". "No es que nosotros seamos leninistas, pero siempre hemos estado en el campo de la justicia y nunca en el campo, no ya de la opresión económica, pero ni siquiera del aprovechamiento", dijo.