El pornógrafo crucificado

Cuando se habla de libertad de expresión, una de las cuestiones más pringosas de explorar es la de la pornografía, y el director checo Milos Forman ha levantado una tormenta de opinión en EE UU y en Francia con The people vs. Larry Flynt (El escándalo de Larry Flynt), acerca del editor de la revista Hustler y sus conflictos con la ley, que culminaron en 1987 con una resolución a su favor del Tribunal Supremo de EE UU. No sólo el contenido del filme ha causado gran revuelo, sino también los carteles, que ya se pueden ver en España anunciando el estreno para el próximo día 28.Un tema central muy agradecido y un despreciable pornógrafo como improbable héroe dé película han dado a Forman su mayor éxito de público y crítica desde el estreno de Amadeus en 1984, pero muchas voces siguen censurando a Flynt.

Columbia Pictures, que distribuye la película, censuró en Estados Unidos el póster que se puede ver en Europa, en el que aparece Woody Harrelson (el actor que interpreta a Larry Flynt) en la postura de Cristo crucificado con una bandera de EE UU a modo de calzón. La imagen fue reproducida el mes pasado en las portadas de las revistas Hustler y Out, esta última la más importante publicación gay del país. En Francia, el cartel de la película ha desatado las iras de dos grupos de católicos encabezados por dos sacerdotes, una asociación tradicionalista ligada a la extrema derecha y un grupo de católicos laicos, que han presentado denuncias exigiendo que se retirase el cartel. Uno. de ellos calificó de "insoportable" el paralelismo entre Cristo "y un pornógrafo crucificado". Ayer, un alto tribunal de París dictaminó, por un procedimiento de urgencia, que los carteles no deben ser censurados. Los jueces consideraron que si algo se le podía reprochar al cartel era su mal gusto, pero no detectaron ultraje alguno a los sentimientos religiosos.

En EE UU no hay semanario, programa informativo o debate de televisión que no haya tocado en las últimas semanas el tema de Larry Flynt y su legitimidad o no como abanderado de la libertad de expresión. El filme ha ganado dos globos de oro (dirección y guión), y su protagonista, Woody Harrelson, está propuesto como actor principal para los oscars.

Flynt, recluido durante los últimos años en su mansión de Los Ángeles y adicto a la heroína y a los calmantes tras la muerte de su mujer, ha vuelto a la luz pública y ha aparecido en diferentes medios, desde la revista George hasta el programa de Larry King en la CNN, cadena que le ha dedicado debates y tertulias.

Encarnación perfecta del redneck (paleto) de Kentucky, Flynt poseía en 1974 una cadena de bares de top less en Ohio, donde editaba un boletín titulado Hustler, con fotos de sus modelos desnudas. Así comenzó su versión del sueño americano, que le llevó a ser un pornógrafo multimillonario y excéntrico, abanderado del mal gusto, rodeado de mujeres en su mansión y propietario de docenas de revistas para adultos.

Con constantes problemas legales por editar material obsceno, en 1977 un francotirador le pegó un tiro a Flynt cuando iba por la calle, relegándole de por vida a una silla de ruedas bañada en oro. Posteriormente, el predicador reaccionario Jerry FallWeIl le demandó por el chiste de HustIer que le acusaba de haber fornicado con su madre. Por esta demanda, el Tribunal Supremo de EE UU emitió en 1987 una decisión histórica a favor de Flynt y de la primera enmienda de la Constitución de EE UU, que defiende la libertad de expresión.

Los más prestigiosos medios de EE UU, desde The Wall Street Journal hasta Rolling Stone, pasando por The New York Times y otros, hablan de un verdadero éxito del cine americano. En el país que inventó la corrección, política y donde se sufre la censura económico-moral de los grandes conglomerados del entretenimiento, ese triunfo es doble.

Al final de la película, Woody Harrelson (Flynt) dice a unos periodistas: "Si la primera enmienda protege a una basura como yo, entonces os protegerá a todos vosotros". Ese es el mensaje del caso de Larry Flynt, sobre el cual el propio Milos Forman ha dicho en la revista George. "Es como América, tiene lo mejor y lo peor".