Inquietud ante el futuro en Hong Kong y Taiwan

Hong Kong, colonia británica que el próximo mes de julio se reincorporará a China, y Taiwan -la otra China- se interrogan con inquietud sobre el futuro de su relación con el coloso asiático tras la desaparición de Deng: Xiaoping. Mientras Pekín ha mirado a Hong Kong y Taiwan como partes integrantes de China, estos territorios se han considerado como entidades diferenciadas política, económica y culturalmente del continente. Ahora temen que la desaparición de Deng Xiaoping sea utilizada por sectores duros que impongan un política más rígida con relación a ambos territorios.

Aunque la desaparición de la escena pública del líder chino ha sido progresiva y por ello se ha reducido el impacto de su muerte sobre las economías de China y de Hong Kong, en la colonia británica se preguntan ahora si la fórmula "un país, dos sistemas", sobre la que se basa la reintegración, sobrevivirá y cuánto tiempo a su inspirador, Deng Xiaoping.

El último gobernador británico, Chris Patten, ha recordado, en un comunicado. emitido en la noche del jueves que, el concepto de Deng de "un país, dos sistemas hizo posible el éxito de las, negociaciones chino-británicas y ha sentado las bases de la estabilidad y la prosperidad de Hong Kong" a partir del 1 de julio de 1997, cuando se reintegre a China.

Anson Chan, que ayer fue ratificada como número dos del Comité Ejecutivo de la Región Administrativa Especial de Hong Kong, expresó ayer su convencimiento de que la muerte de Deng no afectará a la "trasición armoniosa" de la colonia hasta el 1 de julio.

Menos optimista se muestra Martin Lee, presidente del Partido Demócrata, principal formación política del territorio, para quien la línea de Pekín sobre la colonia está siendo reorientada por los sectores duros del régimen de Pekín, más partidarios de una política de férreo control frente a la línea de mayor autonomía y liberalismo de Deng.

Homenaje de Taipei

En Taipci, el primer ministro de Taiwan, Lien Chan, rindió ayer homenaje a las reformas ,lanzadas por Deng y reiteró su compromiso en la búsqueda de una reunificación pacífica con el continente tras la muerte de Deng.Lien invitó a Pekín a reanudar el diálogo interrumpido en 1995 y a adoptar una actitud más pragmática hacia Taiwan, que haga desaparecer la política de hostigamiento hacia la isla. El primer ministro de Taiwan expresó su esperanza de que, en el periodo que ahora se, abre en China se mantenga la estabilidad y "continúe la liberalización económica, edificando una sociedad democrática".