Los clubes franceses piden ayuda al Gobierno

La Liga francesa está quedándose en mantillas. Mientras la selección juega a gran nivel, los futbolistas emigran por docenas y los clubes parecen incapaces de competir en Europa. La reciente humillación infligida por la Juventus al PSG (1-6 en París) ha hecho saltar todas las alarmas, y el Gobierno de Alain Juppé se ha declarado dispuesto a tomar medidas. En marzo empezará a discutirse en el Parlamento una ley sobre el estatuto jurídico y fiscal de los futbolistas profesionales, que, de aprobarse, les equiparará a los artistas. El objetivo es reducir los impuestos sobre clubes y jugadores, para que los salarios franceses sean comparables con los de otros países.Martel ha convencido al ministro de Juventud y Deportes, el ex atleta Guy Drut, de que la actual estructura socioeconómica del fútbol francés es insostenible. Y pare ce seguro que la fiscalidad será más leve a partir de la próxima temporada. En estos momentos, los clubes franceses pagan a Hacienda, como promedio, un 30% más que sus rivales de la Unión Europea. La idea adoptada por el Gobierno es la de dividir en dos mitades las retribuciones de los futbolistas: la primera considerada como salario, será gravada al 56%; la segunda corresponderá a "derechos de imagen" y el impuesto se reducirá al 33%. El nuevo sistema, aplicado a un jugador con un sueldo mensual de 200. 000 francos (cinco millones de pesetas), permitirá al club un ahorro cercano al millón de francos (25 millones de pesetas) cada año.

El Gobierno francés se niega a escuchar, por el momento, reivindicación: la posibilidad de convertirse en sociedades, anónimas como cualquier empresa, en lugar de mantener el vigente estátuto de "sociedades anónimas de finalidad deportiva". Ante la exigencia de mayor libertad económica planteada por los clubes, el Gobierno, esgrime un problema de tamaño. Salvo el PSG, propiedad de Canal +, y en cierta forma el Marsella, los clubes franceses son muy modestos. Auxérre, el actual campeón, tiene un presupuesto anual de 1. 800 millones de pesetas y nunca ha jugado en casa ante más de 21.000 espectadores. El estadio del Mónaco, actual líder, tiene capacidad para 18.000 personas, y suele estar casi vacío.