El Supremo sentencia que Perote sea juzgado por un tribunal militar
El coronel Juan Alberto Perote, ex jefe de la Agrupación Operativa del Cesid, se sentará en el banquillo ante un tribunal militar, probablemente antes del verano, al desestimar el Supremo su último recurso. El alto tribunal rechazó la petición de Jesús Santaella, defensor del ex agente secreto, de que la causa pasara a la jurisdicción ordinaria. Perote está acusado de revelación de secretos y se enfrenta a una petición fiscal de 10 años de prisión. Está en la cárcel militar de Alcalá de Henares (durante dos meses y medio estuvo bajo arresto domiciliario) desde junio de 1995.
El objetivo de Santaella era que la causa pasase al juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, pero la Sala Quinta del Tribunal Supremo lo ha impedido con una sentencia dictada ayer. Perote fue detenido el 18 de junio de 1995 y acusado de sustraer 1.245 microfichas que contienen los llamados papeles del Cesid sobre la guerra sucia contra ETA. Dos altos tribunales tienen en sus manos el destino inmediato de Perote. La Sala Tercera del Supremo, que examinó los papeles la semana pasada, ha de decidir si el contenido de las fichas afecta a la seguridad nacional. Si se desclasifican, Perote quedaría exonerado del delito de revelación de secretos que afectan a la seguridad y la defensa nacionales, por el que está procesado. El Constitucional, por su parte, debe aclarar si el ex jefe de espías queda en libertad provisional por sobrepasar el periodo máximo de prisión preventiva. La clave es cómo se contabiliza su arresto domiciliario. Antes del juicio deben practicarse pruebas pedidas por la defensa y la acusación. Entre estas últimas destaca la incorporación a la causa de los cuatro papeles intervenidos a Perote en la cárcel, uno de los cuales intentó tragarse, y que demuestran que hizo copias de las microfichas que se llevó del Cesid en noviembre de 1991 y devolvió dos meses después.
