La FIFA inhabilita a Lendoiro hasta agosto de 1998
, Augusto César Lendoiro, presidente del Deportivo, dejó la sede de la FIFA en Zúrich aparentemente tranquilo mediada la mañana de ayer. Había ido allí citado por el comité de disciplina para explicar por qué acudió a los tribunales ordinarios para evitar el cierre del estadio de Riazor por un partido. Tras dar su versión de. los hechos, aseguraba que la FIFA no disponía de toda la información sobre el caso y pensaba que había logrado dar todo tipo de explicaciones. En ese mismo momento, Ángel María Villar, presidente de la federación, entraba por la puerta de atrás para dar su versión. Apenas unas horas después, Lendoiro recibía la noticia como un golpe en el mentón: la FIFA le inhabilitaba hasta agosto de 1998 y sancionaba al Deportivo con 10 millones de multa.
Lendoiro se mostraba sorprendido y añadía que el castigo le parecía una "exageración". La FIFA aclaraba que la sanción era apelable. "La comisión", sancionó la FIFA, "Ilegó a la conclusión de que el Deportivo contravino el artículo 59 de los estatutos de la FIFA al haber acudido a un tribunal ordinario para protestar por la orden de cierre del estadio. Asimismo, juzga probado que Lendoiro hizo declaraciones injuriosas contra autoridades de la FIFA y de la federación española".
Lendoiro creía haber podido convencer al comité de disciplina de la FIFA. "No disponían de los datos básicos y no tenían buena información". La FIFA, según Lendoiro, desconocía que en España no existen los tribunales de arbitraje en el deporte y que el Deportivo había acudido a los tribunales ordinarios por falta de confianza en la federación. Tras conocer la sanción, se quedó sin palabras. "Es una exageración", fue todo lo que acertó a decir.
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