TVE tuvo en enero la peor audiencia de su historia
A pesar de mantener el liderazgo de audiencia, la primera cadena de Televisión Española ha experimentado en los nueve meses gestionados por el equipo nombrado por el PP progresivas pérdidas de espectadores. En este lento descenso, el mes de enero de 1997 ha marcado la cota más baja de audiencia en la historia de Televisión Española desde la irrupción de las cadenas privadas. Según los datos de Sofres, en el último año, TVE-1 ha pasado del 28,2% de cuota, de pantalla (enero de 1996) al 24,7% (enero de 1997). Sus apuestas más significativas de esta temporada, conducidas por veteranos rostros de la pequeña pantalla como Pedro Ruiz, Laura Valenzuela o Nieves Herrero, se han saldado con sonoros fracasos.
Frente a esta caída en picado de La Primera, La 2 ha experimentado un ligero incremento, pasando en el mismo período de tiempo del 8, 1 % al 8,4% de cuota de pantalla. La transmisión de los Juegos Olímpicos de Atlanta -celebrados entre julio y agosto de 1996- ha contribuido decisivamente en el mantenimiento de la media de audiencia de La 2.La dirección general de RTVE remitió una nota en la que puntualizaba que durante los nueve meses de gestión del equipo popular la cuota de pantalla de TVE-1 ha sido del 25,9% y la de La 2 se ha situado en el 9,5%.
Desde el nacimiento de las televisiones privadas, en 1990, TVE-1 ha ido cediendo puntos en el terreno de la audiencia. La competencia provocó en los primeros años de la década un reajuste en la distribución del público, que corrió en paralelo a la ampliación del ámbito de cobertura de las cadenas privadas Antena 3 y Tele 5.
Metidos en plena competencia, TVE-1 cerró 1994 y 1995 con la misma audiencia media (27,6%). En 1996, con pequeños altibajos, comenzó la caída. Hasta llegar a enero de 1997, que registra una pérdida de 3,5 puntos respecto al mismo mes del año anterior.
Con estos datos, los cuatro miembros del PSOE del Consejo de Administración hicieron ayer balance de los nueve meses del equipo de Mónica Ridruejo al frente del ente público. Diego Carcedo calificó de "inquietante" la situación por la que atraviesa la radiotelevisión pública. "Sería muy conveniente para el futuro de RTVE el relevo del actual equipo directivo", dijo.
Marcos Sanz mostró su preocupación" por la evolución de TVE-1, una cadena que "además de tener menos público es cada vez menos pública. Está por debajo de la barrera psicológica del 25%". Achacó esta circunstancia a una crisis de oferta. "El actual equipo no tiene solvencia para producir programas de televisión pública. Ninguno de los programas que se han puesto en pie arroja una mínima esperanza", añadió.
Durante la etapa de Ridruejo se han mantenido en cabeza algunos de los programas -Hostal Royal Manzanares, Qué apostamos, El semáforo, Estamos de vuelta- heredados de su antecesor, Jordi García Candau. Pero las innovaciones se han saldado con estrepitosos fracasos. Pedro Ruiz, con El domin ... gol, Nieves Herrero, con Hoy es posible, y Laura Valenzuela, con Mañanas de Primera y Entre tú y yo, no consiguen levantar cabeza. Los ensayos para reflotar las bandas de la mañana y de la tarde tampoco se han visto acompañados por el éxito.
Pedro Ruiz fluctúa entre el 10,5% y el 8,6% de cuota de pantalla, con El domin ... gol. El apoyo por parte del público está por debajo del que conseguía Sólo goles, el resumen deportivo que presentaba Matías Prats en La 2, un programa que, paradójicamente, contaba con mucho menor presupuesto.
Por su lado, Laura Valenzuela ha obtenido en los últimos días de enero cuotas de pantalla que rondan el 14%. Y Nieves Herreno, uno de los fichajes millonarios de la temporada televisiva, no consiguió situarse con su solidaria oferta entre los diez espacios más vistos del día. Tanto la banda matinal como la de tarde, renovadas a principios de año, no han podido hacer sombra a los programas de la competencia.
Frente al rosario de fracasos, sobresale el éxito de Muchas gracias, nuevo programa presentado por Ana García Obregón, que se situó el pasado sábado entre los programas más vistos del día, con una audiencia media de 3,6 millones de espectadores. Pendientes del Gobierno
En cuanto a los espacios informativos, los representantes socialistas criticaron con dureza lo que denominaron "telediarios militantes", más pendientes "de la agenda y de los intereses del Gobierno que de los contenidos informativos". Los programas informativos, dirigidos por Ernesto Sáenz de Buruaga -presentador también del Telediario de las 21.00-, confunden opinión con información y los principios de objetividad, imparcialidad y veracidad recogidos por el Estatuto "están por los suelos", según los vocales del PSOE.
Antonio Santillana evaluó la situación económico-financiera. Frente a los 225.000 millones de pesetas de deuda heredada, el actual ejercicio arrojará un endeudamiento de 425.000 millones y en el 2001 habrá engordado hasta alcanzar un billón de pesetas, según sus cálculos. Estas cifras fueron puntalizadas por la dirección general. RTVE matizó que el endeudamiento financiero del anterior equipo directivo era de 249.662 millones de pesetas.
Por último, la consejera Arantxa Mendizábal lamentó la actitud "autoritaria" de Mónica Ridruejo, en cuestiones tales como la integración de RTVE en la plataforma digital liderada por Telefónica, asunto en el que "la dirección general ha actuado con sumisión al Gobierno".
Por otra parte, el portavoz del PP en la comisión de Control Parlamentario de RTVE, José Manuel Peñalosa, acusó a los socialistas de utilizar el Consejo de Administración para "insultar y descalificar a los profesionales y criticar al Gobierno".
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