González dice que la prioridad hasta el congreso del PSOE es hacer oposición

Felipe González no quiere hablar de quiénes van a entrar o salir de la nueva comisión ejecutiva del PSOE, y tampoco quiere que lo hagan los dirigentes de su partido. Y si lo hacen, pretende que no se sepa. El líder socialista indicó ayer a sus compañeros de la ejecutiva federal que, de aquí a junio, cuando está previsto que se celebre el 34º congreso el PSOE, la prioridad debe ser hacer oposición y preparar una ponencia-marco sólida

Los asistentes a la reunión de la ejecutiva advirtieron contrariedad en el tono de González al tratar del revuelo creado hace días, después de que su teórico número dos, Alfonso Guerra, asegurase que el presidente andaluz, Manuel Chaves, encabezaba una conspiración para eliminarle de la próxima dirección del partido.Matilde Fernández criticó la reunión de los barones del pasado día 13 en la que se decidieron en la práctica las fechas del 34º congreso. Se celebrará los días 13, 14 y 15 de junio, según acordó ayer, formalmente, la comisión ejecutiva federal. Para su ratificación se ha convocado un comité federal para el 8 de febrero. Habrá otro más, el 1 de marzo, en el que los miembros de ese máximo órgano de dirección del PSOE podrán enmendar la ponencia-marco que días antes les habrá remitido la ejecutiva. Joaquín Almunia, responsable de Estudios y Programas, coordinará ese trabajo, en el que participarán los otros miembros de la comisión permanente. Es decir, Ciprià Ciscar, Txiki Benegas, Francisco Fernández Marugán, Alejandro Cercas, Ludolfo Paramio, Raimon Obiols y Clementina Díez de Baldeón.

No más de 25 minutos empleó ayer la ejecutiva en hablar del Congreso. El resto del tiempo, tres horas y media, se habló del Gobierno, y mal. Sí hubo ocasión, no obstante, para que González diera muestras de su contrariedad. por el hecho de que el preanuncio de convocatoria del congreso se hubiera llenado con polémicas internas. "Habrá gente que esté interesada en los asuntos internos, en los miembros de la ejecutiva, en los órganos, etc; yo no", aseguran que dijo. También que admite su preferencia por una ejecutiva pequeña y ágil, pero nada más.

Su desinterés por las cuestiones formales se extendió incluso a la fecha de celebración del congreso. Txiki Benegas, secretario de Política Institucional, y Juan Carlos Rodríguez Ibarra, presidente extremeño, señalaron, "a modo de reflexión política", la conveniencia de que se retrasara. Benegas habló de febrero o marzo de 1998, con el argumento de que, en estos momentos, se está tomando el pulso a la labor de oposición y no convendría interrumpirla. Ibarra abogó por el próximo octubre. González señaló que también eso le daba lo mismo y, que si querían hacerlo más tarde, no habría problemas pero no fue necesario, porque los citados precisaron que se trataba de una reflexión, pero que daban por buenas las fechas que prefería la mayoría.

Matilde Fernández criticó "Ia forma" en la que se ha llegado a convocar el congreso. Aludía a la reunión del 13 de enero en la que ocho barones, junto a Ciscar y Almunia, dijeron a González que pensaban que el congreso debía celebrarse cuanto antes. Esa reunión dio pie a Guerra para hablar de conspiración contra él. González respondió a Fernández que estaba en lo cierto respecto a que la forma quizá no había sido la más adecuada. Antes, Ciscar había explicado las razones para que el congreso sea en junio. La necesidad de dedicar 1998 a la oposición y la dedicación en el otoño a las probables elecciones gallegas fueron sus argumentos. , Según las fuentes informantes, González persistía en su tono de falta de interés por el asunto, Io que contrastaba vivamente con la vehemencia que había mantenido durante más de tres horas hablando de financiación autonómica, protocolo eléctrico, sanidad y Educación.

La mayoría de los miembros de la ejecutiva llegaron a la reunión con cierta expectación, pero las tablas de Alfonso Guerra, Manuel Chaves e incluso de José Bono permitieron que, durante más de cuatro horas, nadie notara nada anormal. Guerra no habló. Chaves tampoco. Bono no repitió su propuesta de que González se abstenga de confeccionar la lista de la ejecutiva. Esta petición sí tuyo respuesta de Rodríguez Ibarra ante las cámaras de Antena 3. A juicio del presidente extremeño, González tiene que intervenir en la elección de las personas que trabajarán con él. Eso sí, teniendo en cuenta "Ia pluralidad del PSOE". "González tiene que ser capaz de trabajar con los que le son y con los que no le son", aseguró.