Mientras el cuerpo aguante

La Bolsa continúa mirando de reojo a Nueva York, aunque juega a ser independiente cuando las cosas parecen claras a los ojos de los operadores. Así sucedió ayer, en que Wall Street abrió a la baja y, a la hora del cierre en España cedía 44 puntos (-0,69%). Eso no impidió que la Bolsa de Madrid se anotase un nuevo máximo histórico al situar su índice general en 447,57 puntos, con una ganancia del 0,49%. El Ibex 35 también se anotó otro récord al llegar hasta 5.161,56 (+0,40%). Las bolsas europeas habían seguido a Nueva York y terminaron con retrocesos: Londres cedió un 0,68%, París un 0,22% y Francfort un 0,48%.El volumen negociado en Madrid fue el segundo más alto de las últimas semanas, 102.892 millones de pesetas, lo que confirma el impulso del mercado, aunque ayer los operadores han sido bastante selectivos: hay cierta cautela ante algunos valores que se consideran sobrecomprados. En realidad, Telefónica, Iberdrola, Repsol y Banesto controlaron la mitad del negocio. Las acciones de esta última entidad se revalorizaron casi un 15%.

Mientras, los mercados de deuda estuvieron relativamente tranquilos. El Tesoro recortó en subasta al 5,896% la rentabilidad de los bonos a tres años (-0, 109 puntos) mientras que aumentaba la de las obligaciones a 10 años al 7,047% (+ 0,132). Un movimiento muy leve que se tradujo en que el bono de referencia a 10 años subiera al 6,95% en el mercado secundario aunque el diferencial con el bono alemán se mantuvo en el 0,99%.