La Fiscalía de Francfort acusa de fraude al magnate Jürgen Schneider
Los fiscales que investigan el caso Schneider, uno de los mayores escándalos empresariales ocurridos recientemente en Alemania, anunciaron ayer que han decidido acusar al magnate Jürgen Schneider, de 62 años, de varios delitos de fraude que le pueden costar hasta 15 años de prisión. La Fiscalía de Francfort acusó a Schneider, cuyo prestigioso imperio inmobiliario colapsó con unas deudas superiores a los 5.000 millones de marcos (unos 415.000 millones de pesetas) en 1994, de falsificar las cuentas de sus compañías y exagerar sus ingresos para conseguir préstamos.El caso desató, en su momento, el temor a que se derrumbaran los precios de los inmuebles, dejó a miles de obreros y operarios sin trabajo y puso en evidencia a los bancos acreedores de Schneider por la ligereza con que le habían dado financiación. La Fiscalía no cree, por el contrario, que los bancos hayan actuado indebidamente. No ha encontrado pruebas que demuestre una actuación irregular por parte de las entidades acreedoras, a pesar de que Schneider insistió en que éstas le engañaron.
Schneider ha sido acusado de tres casos de grave fraude y un caso de bancarrota. El magnate, que desapareció poco antes de que se destapara el escándalo en abril de 1994 y fue capturado dos años después en Miami, está en la actualidad en una Cárcel de Francfort. Si el juzgado de esta ciudad acepta los cargos presentados, el juicio podría celebrarse, como muy pronto, el próximo verano.
Schneider, un albañil que llegó a convertirse en uno de los empresarios alemanes más conocidos, se hizo famoso comprando y rehabilitando hoteles históricos y construyendo centros comerciales durante el boom inmobiliario que siguió a la reunificación de Alemania en 1989.
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