Comienza la cumbre hispano-portuguesa con el terrorismo y los recursos hídricos como asuntos principales

España y Portugal abordan la cumbre bilateral que comienza hoy en las islas Azores con la certeza de que los problemas entre ambos tienen dimensión europea, ya que a su condición de vecinos no siempre bien avenidos, se ha sumado la de socios comunitarios. De hecho, el crecimiento de las relaciones, económicas, entre ambos países no significa que se hayan resuelto los problemas sobre los recursos hídricos, la inmigración ilegal, los de seguridad y justicia en asuntos relacionados con terrorismo o narcotráfico o la diferencia de criterios sobre la reforma de la UE y la OTAN. A la cumbre, que se inicia, esta tarde con una reunión entre el primer ministro portugués, el socialista Antonio Guterres, y el presidente del Gobierno español, José María Aznar, acuden los ministros de Exteriores, Economía, Justicia, Interior, Fomento y Medio Ambiente de ambos países. Aznar, para quien ésta será su primera reunión,'hispano-lusa tuvo ya un encuentro con - Guterres en septiembre pasado, con una visita privada dentro de esa diplomacia, de "contacto humano" que gusta al líderdel PP. Entre los asuntos que se discutirán destaca la creación de una comisión de magistrados de enlace para coordinar la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo. La presencia de etarras en Portugal preocupa a las autoridades españolas, que han reclamado la extradición del presunto colaborador, de ETA José Luis Telletxea. El caso Telletxea, al igual que el de los narcotraficantes gallegos cuyas propiedades en Portugal han sido inmovilizadas por la Justicia lusa,luna o los problemas de la inmigración ilegal, han puesto-de manifiesto la necesidad de incrementar la colaboración policial hispano-lusa. El problema del agua está pendiente de un acuerdo para el aprovechamientos de los recursos hídricos de la Península. En Portugal temen que los trasvases previstos en España les priven del agua necesaria. La ministra de Medio Ambiente, Isabel Tocino, abordará este asunto, que levanta, recelo en Ia opinión pública portuguesa.