Demagogia
A través de su periódico, que por suerte se recibe con regularidad en esta ciudad, me he informado de la dimisión y posterior reubicación del señor Ramallo. Lo que realmente llamó mi atención de la noticia fue su profesión de corredor de comercio, y que no era un aprietabotones y no se sentía realizado. Yo siempre he defendido y defiendo a España, pues la quiero por numerosas circunstancias; pero, por mi profesión de analista financiero y de inversiones, conozco que el cambio económico no ha llegado a ser tan profundo. Me explicaré. El señor Ramallo, siendo corredor de comercio en España, afirma que no quiere ser un aprietabotones. Pero qué es si no todavía, en su país, un corredor de comercio más que un aprietasellos de caucho contra una póliza de crédito estándar; por ese apretar y pedir un carné de identidad cobran una comisión obligatoria.¿Se sentía más realizado por haber protegido durante este tiempo de la democracia a sus colegas de profesión, y seguir disfrutando de una posición privilegiada de monopolio en sus zonas de actuación?
El día que desde su nueva función en la Comisión de Valores me diga que para dar fe mercantil en cualquier pueblo de España hay un profesional del derecho o de la economía que habiendo pasado un examen y dando un nivel profesional y de honorabilidad, como los auditores o censores de cuentas, le diré que puede sentirse realizado. Si no lo hace así le diré que, por mucho que hable de honestidad, está haciendo demagogia.-.
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