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Los candidatos a decano coinciden en que Madrid necesita más juzgados para acabar con los atascos

El 6 de septiembre se dio el pistoletazo de salida en la batalla por el voto a juez decano de Madrid. 187 magistrados de las distintas jurisdicciones (instrucción, penal, social, civil, menores... ) están llamados el 10 de octubre a la urna que se instalará en la plaza de Castilla para elegir al magistrado que relevará a Manuela Carmena, quien cesó en el cargo en julio tras ser designada vocal del Consejo del Poder Judicial. Cuatro jueces -dos hombres y dos mujeres- han anunciado ya sus candidaturas. Sus programas, con matices, son muy similares. Coinciden, por ejemplo, en que Madrid necesita más juzgados para acabar con el endémico atasco que existe en primera instancia.

El juez decano no es un jefe de jueces. Su misión: representar a sus compañeros, presidir la junta de jueces -donde se unifican criterios- y elevar sus inquietudes. Pero, además, es quien gestiona los servicios comunes de los juzgados. El nuevo decano tendrá a sus órdenes cerca de un millar de funcionarios; y su labor -positiva o negativa- repercute en el usuario y en el funcionamiento general de los juzgados.Los cuatro jueces que oficialmente han anunciado su candidatura son: con el respaldo de la Asociación Jueces para la Democracia, Javier Martínez Lázaro, de 42 años, y titular del Juzgado de lo Penal 4; con el de la Unión Judicial Independiente, Eva Gallardo Martín-De Blas, de 36, del Juzgado de lo Penal 26; con el de la Asociación Profesional de la Magistratura, Fernando Fernández, de 33, y titular de Primera Instancia 18, y con el de la Asociación Francisco de Vitoria, María Tardón Olmos, de 38, y responsable del Juzgado de Instrucción 11.

Programas con matices

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Fuentes jurídicas señalan la posibilidad de que otros dos jueces se sumen a última hora a esta singular batalla por el voto: el actual decano en funciones, Juan José Navarro Fajardo (él quiere concurrir a los comicios, pero el Consejo le ha advertido que si es candidato debe cesar ya como decano en funciones); y Jesús Gavilán, titular del Juzgado de Familia 24 de Madrid. Gavilán, segundo en número de votos en las elecciones que auparon a Carmena al decanato, asegura que hoy por hoy no es candidato. No obstante, se reservará esa posibilidad hasta última hora, siempre y cuando disponga de la aquiescencia de su asociación.Los cuatro candidatos oficiales aportan recetas similares -"consenso", "diálogo"...- para las diversas patologías que aquejan a los juzgados madrileños (guardias, saturación de causas, escasez de medios técnicos y humanos... ). Coinciden, por ejemplo, en que hay que crear más juzgados y reformar la ley, sobre todo en la jurisdicción civil, para mitigar los fenomenales retrasos que padecen estos órganos. Y también, en otorgar mayor protagonismo a la junta de jueces.

Eva Gallardo, respaldada por la Unión Judicial Independiente, minoritaria y de carácter liberal, potenciará el diálogo con las distintas juntas sectoriales de jueces. Basará su papel "en asumir" las peticiones de la junta "y elevarlas a las instancias oportunas". El programa de su compañera María Tardón, de la Asociación Francisco de Vitoria (que en térmi nos políticos ocuparía un espacio de centro) no es muy distinto. Aboga por buscar el mayor "consenso" posible y convertirse en "correa de transmisión" de los problemas e inquietudes de sus colegas antes las instancias superiores. Tardón promete luchar sin tregua para dignificar la actividad judicial de sus compañeros, y, de acuerdo con ellos, no callarse ante los problemas que surjan.

A pesar de que es el candidato de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), conservadora y mayoritaria, Fernando Fernández matiza que su programa es personal ("no de la APM"). Entre sus objetivos, destaca estudiar, caso por caso y junto con cada colega, las necesidades humanas y técnicas de cada juzgado. Y elevarlas al Ministerio. Cree posible dignificar la figura del juez, proporcionándole los medios que precise, en aras a que Madrid disponga de una justicia "de calidad y cantidad". Creará, además, una especie de gabinete de apoyo al magistrado, cuya misión sería "asesorar personal, administrativa y judicialmente a los jueces que sufran ataques injustificados.

Javier Martínez Lázaro, candidato de la asociación progresista Jueces para la Democracia -a la que pertenecía la anterior decana- advierte que su gestión no será "meramente continuista", aunque elogia la labor de Carmena. La búsqueda del consenso, la creación de la figura del vicedecano en las distintas jurisdicciones y la necesidad de "implicar" aún más a las administraciones madrileñas definen, a grandes rasgos, su programa, en el que analiza la situación de los juzgados y sugiere soluciones. A título de anécdota, cuenta que la bandera de la Comunidad, a diferencia de otras regiones, no está presente en ningún juzgado.

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