Venganza
A temblar. Muchas cosas tuvieron que pasar por la cabeza de los jugadores del Valencia cuando Ziegue marcó el primer gol nada más comenzar. La sospecha de otra debacle estaba latente. Con 87 minutos por delante la perspectiva era bastante negra. Afortunadamente, Zubizarreta intuyó el flojo lanzamiento de un cuestionado Klinsmann.Fuera de juego. El Valencia tenía bien aprendida la lección. Numerosas fueron las ocasiones que Bayern incurría en fuera de juego. Les cortó totalmente el ritmo. Los valencianos pasaron a poseer el balón, evitando el acoso sobre su portería. Esto acabó desesperando a los alemanes.
Sin tallos. El Valencia intentó controlar el balón durante el mayor tiempo posible. Aunque sin crear excesivo peligro, el Bayern no dejó salir de su campo al Valencia durante tres cuartas partes del partido. Fue perfecto en la coordinación de su defensa al adelantarse y abortar continuamente el juego ofensivo de los alemanes. No falló ni una sola vez. Tampoco el línea, afortunadamente.
Balón parado. Aguantó bien el Valencia los envites del Bayern. Solamente en las acciones a balón parado creaba peligro. Algunos lanzamientos desde fuera del área que encontraron a un seguro Zubizarreta. En los últimos 20 minutos se adueñó del juego y tuvo grandes ocasiones. José Ignacio, Fernando y VIaovic nos pudieron ahorrar los últimos minutos de tensión.
La tradición. Hacía 23 años que el Bayern no caía en la primera ronda. Por fin, se rompió la tradición. Los precedentes que existían de los enfrentamientos con equipos españoles eran demoledores. El Bayern siempre se mostró intratable. El Valencia se ha vengado con todo merecimiento de los agravios sufridos hasta ahora.
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