Marianne Bachmeier, la madre vengadora
Marianne Bachmeier saltó a la fama el 6 de marzo de 1981, cuando en plena sala del tribunal en Lübeck mató de varios disparos por la espalda a un carnicero de 35 años acusado del asesinato de su hija Anna, de siete años. Días y días la prensa amarilla alemana encontró materia abundante para tremendos titulares sobre la madre vengadora. La nación se dividió entre quienes consideraban una heroína a aquella atractiva mujer de 30 años, que se vengó por su propia mano y aplicó la ley del Talión a quien abusó sexualmente y mató a su hija, y los que condenaron el linchamiento. La prensa sacó a relucir que Bachmeier, propietaria de un bar, había entregado para adopción a dos hijas anteriores. Aumentó la polémica, sazonada por su apariencia y buena figura. Dos años después un tribunal la condenó a seis años de cárcel por homicidio, pero sólo cumplió dos más, en parte en el hospital, por considerarse que corría riesgo de suicidio.Al salir de la cárcel, Bachmeier siguió sin dar respiro a su vida. Se casó y vivió en Nigeria hasta su divorcio en 1990. De allí se trasladó a Sicilia, donde siguió ocupada con la muerte al ayudar a los enfermos terminales. Se enteró el día que cumplió 46 años, el pasado junio, de que padecía un cáncer incurable y un amigo filmó una película, La lenta muerte de Marianne Bachmeier, por encargo de la televisión alemana. El pasado martes, en Lübeck, la muerte puso el punto final.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.