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FÚTBOL TERCERA JORNADA DE LIGA

El Tenerife despierta de su sueño

El Sevilla disipa sus dudas con un partido casi perfecto

A José Antonio Camacho se le da el Rodríguez López. El pasado año, también a comienzos de temporada, el Espanyol lograba golear al Tenerife en un buen encuentro basado en mortíferos contraataques. En la tarde noche de ayer, Camacho volvió a ganar la partida a Heynckes y logró una brillante y merecida victoria que hace despertar al equipo canario del sueño de mantenerse al frente de la clasificación. Ayer el Tenerife dejó de ser el líder, algo que disfrutaba desde la jornada inaugural.La primera mitad fue de auténtico desconcierto del Tenerife, que se vio sorprendido por la presión del Sevilla, de la que casi nunca supo salir. El conjunto de Camacho logró controlar el juego y fue dueño del balón la mayoría del tiempo, aunque hasta el minuto 23 no se acercó a puerta.

Ante la imposibilidad de llevar la iniciativa, el Tenerife se limitó a aprovechar los pocos fallos que cometía el contrario para lanzar el contraataque. Por contra, el Sevilla insistió en su presión y cerca de la media hora ya comenzaba a acercarse con peligro a la portería de Ojeda.

La sombra del gol merodeaba la portería de Ojeda, que tuvo que emplearse a fondo en varias oportunidades. En una de ellas no fue suficiente su intervención a tiro de Tevenet, puesto que el rechace lo aprovechó Salva para adelantar a su equipo en el marcador.

En la segunda mitad, el Tenerife seguía atenazado, con despistes en defensa y sin capacidad de reacción. A pesar de todo, el conjunto canario se fue hacia adelante con mucho corazón pero con escasas ideas. La jugada más utilizada eran los balones largos. Pero en el Tenerife no había una segunda línea que aprovechara los rechaces defensivos.

Así las cosas, el partido se ponía muy bien para el arma que mejor maneja José Antonio Camacho, el contraataque. Frente a los impulsivos ataques del Tenerife, el Sevilla cerraba muy bien su retaguardia y enviaba balones en profundidad que cogían descolocada a la defensa rival.

En uno de esos contraataques, Rafa Paz envió el balón al poste y cuatro minutos después un envío de Gómez fue aprovechado por Salva para superar a Ojeda en la salida y sentenciar el encuentro.

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