Fianza millonaria para el acusado de secuestrar al padre de su ex novia

La juez María Teresa Chacón comunicó ayer personalmente a Francisco Javier Cervigón -de 32 años, encarcelado por el secuestro del químico de Algete José Luis Zaragoza, de 65 años- su decisión de procesarle por un delito de detención ilegal y otro de tenencia ilícita de armas. Además, le comunicó que debía pagar una fianza de 20 millones de pesetas en concepto de responsabilidad civil y que, de momento, seguirá en la cárcel.La juez indica en el auto de procesamiento que "existen indicios racionales de que Cervigón privó de libertad al químico sobre las 10.30 del 6 de octubre pasado", y que, desde entonces, no se "tienen noticias sobre su paradero". Y, además, resalta "las contradicciones" en que incurrió Cervigón para justificar dónde estuvo el día en que Zaragoza fue visto por última vez. El químico salió en su coche con destino a Zaragoza. Iba a cazar, pero nunca llegó a su destino.

Llama la atención de la juez, y así lo explica en ésta y otras resoluciones anteriores, el empeño de Cervigón por buscarse coartadas -antes incluso de ser detenido- sobre los lugares en los que estuvo el 6 de octubre. Cervigón dijo dos cosas: una, que la mañana de ese día estuvo en la cafetería del colegio mayor en el que estudiaba. Lo cierto, según la juez, es que pidió al encargado de la citada cafetería que si la policía preguntaba por él dijese que había estado allí por la mañana. Así lo ha contado el encargado a la juez, desmintiendo esa primera coartada. La segunda coartada, también refutada, consiste en que al salir de la cafetería permaneció en la vivienda de la madrileña calle de la Dulzaína, que compartían con María Luisa, su ex novia, e hija del químico. María Luisa lo niega. Asegura que Cervigón llegó a la vivienda de Dulzaína por la tarde, pero no por la mañana como sostiene el acusado. También recoge la juez en su auto de procesamiento las gestiones de Cervigón para cobrar un rescate de 90 millones a cambio de la libertad del químico. Alegó que Zaragoza estaba secuestrado y que él actuaba como intermediario de la banda mafiosa que le retenía. Como prueba de que el químico seguía vivo efectuó un "montaje con una fotografía del desaparecido emitida por televisión".

"Que diga dónde está"

Hermenegildo Pérez Bolaños, abogado de la hija del secuestrado, a la que Cervigón está tratando de implicar en el secuestro, expresó ayer su satisfacción por la resolución judicial, que él había solicitado en julio. Pérez Bolaños, conocido también por ser el abogado de la familia de Susana Ruiz, hizo un llamamiento a Cervigón "para que confiese de una vez por todas", dijo, "dónde tiene retenido al señor Zaragoza".Tras notificar el auto de procesamiento a Cervigón, quien acudió esposado a los juzgados, la juez interrogó a un conserje de la cafetería. Cervigón dice que le telefoneó la mañana del 6 de octubre, el conserje lo negó ayer.