Voley playa... en la piscina

Los esfuerzos de los municipios madrileños por tener playa para ser perfectos no tienen límite. La localidad de Alcorcón (144.850 habitantes) aún no ha conseguido las ansiadas olas, pero ya ha adoptado un deporte típico de la costa: el voley playa.Sobre la nueva pista instalada en la piscina municipal de La Canaleja, sólo pisaban al principio los expertos en voleibol y los deportistas profesionales que la utilizaban como lugar de entrenamiento. Desde hace unas semanas, sin embargo, la afluencia de público de todas las edades ha obligado a los responsables de la cancha a dosificar el uso de la misma en algunas ocasiones.

Sin duda, el revulsivo para esta explosión de adictos al voley playa ha sido el ver por televisión las curvas esculturales y los fornidos torsos de los atletas olímpicos que, ligeritos de ropa, han participado con este deporte en Atlanta. "Antes, la gente nos miraba entrenar, pero con los Juegos Olímpicos todo el mundo participa a tope", comenta Noé de Mena, un joven de 17 años.

Este alcorconero lleva algo más de un año practicando el voley playa junto a su compañero Antonio Gutiérrez. Ambos se presentaron a un torneo en Alcalá de Henares y quedaron los últimos. "Éramos muy malos", dice. Sin embargo, a raíz de descubrir la pista de la piscina municipal y emplearse a fondo, participaron en el campeonato de Madrid, en el que quedaron los primeros, de un total de 20 equipos. Y es que, a pesar de una dilatada experiencia de nueve años en el voleibol, hay diferencias muy importantes entre los dos deportes.

"El voley playa rompe las piernas porque la pista tiene las mismas dimensiones que la cancha de balonvolea y los dos jugadores se fatigan más al correr de un lado a otro con el freno añadido de la arena". Con todo, este deporte también tiene sus ventajas. "Se liga más y lo puede practicar cualquiera", comenta Noé entre risas."A diferencia del voley de siempre, no es necesaria cierta altura sino ser más listo y resistente que el contrario", añade.

Los responsables municipales no tuvieron que realizar una gran inversión y, sin embargo, el "invento" goza de una gran aceptación del público. "Se ha convertido en el deporte de moda de chavales y adultos", señalan estos responsables. Pero el hecho de ser una nueva instalación también implica fallos de principiante. "Un domingo vi la pista sola, pero ningún cartel que indicara que se pudiera jugar gratis ni que la pelota estuviera a nuestra disposición", lamenta Daniel Martín, un usuario de La Canaleja. Además de la falta de información, la pista del voley playa tiene otro inconveniente: "No se puede jugar en invierno", dicen sus incondicionales. En lugar de arena de playa se ha colocado otra algo más gruesa que ha provocado pequeñas heridas en los pies descalzos de algunos jugadores. La solución, jugar con las zapatillas puestas.

Pista de voley playa, piscina de La Canaleja (kilometro 12,500 de la carretera de Extremadura, junto a Renfe de San José de Valderas). A diario, de 12.00 a 20.00. Entrada a la piscina, 450 pesetas.