Una bomba causa dos muertos y 110 heridos en el Parque Olímpico de Atlanta
Una bomba de fabricación casera causó dos muertos y 110 heridos en el corazón de los juegos, el Parque Olímpico, una zona de recreo en la que se congregaban cerca de 40.000 personas por la celebración de un concierto de rock. Era la 1.25 (7.25, hora peninsular española). Tres horas y media después del atentado, el Comité Olímpico Internacional anunció que los Juegos continuaban. Durante la jornada se guardó un minuto de silencio al inicio de cada competición y las banderas se hizaron a media asta. Ningún atleta ni ciudadano español resultó herido. El presidente Clinton pidió la pena de muerte para los autores del atentado.
Veinte horas después de atentado, la psicosis de peligro volvía a dispararse, al escucharse una explosión en un centro comercial de Atlanta. Pronto se supo que la policía había hecho explotar una bolsa sospechosa.La seguridad en el Parque Olímpico había sido duramente cuestionada. El parque fue levantado como una feria para reproducir la atmósfera de Barcelona y de Lillehammer. Un espacio abierto, sin controles. La bomba estalló junto a una gran torre de luz, a pocos metros del escenario donde actuaba un grupo de rock. El artefacto estaba oculto en una bolsa de papel. La explosión provocó escenas de pánico y el caos circulatorio en Atlanta.
En la Villa Olímpica, donde se alojan la mayoría de los 11.000 deportistas que participan en los Juegos, se impidió la entrada o la salida a cualquier persona. El comité ejecutivo del COI se reunió con carácter de urgencia y anunció que los Juegos continuaban.
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