Olano: "En el momento crítico sabré lo que tengo que hacer"

Rominger y Olano respondieron a la prensa sin fisuras. Rominger tomó el micrófono y supo llevar el asunto por el te rreno que le convenía. No le in teresaba que le martirizaran con preguntas sobre la falta de iniciativa del Mapei. Tampoco que quisieran encontrar una contra dicción entre él y Olano. Así que fue rotundo y claro. Sobre los ataques dijo: "No puedo decir qu , e voy a atacar porque luego me pasa lo que en el Hautacam, que dije que iba a atacar, me quedé sin fuerzas y se me quedó cara de tonto. He perdido cinco Tour. No tengo nada que per der. Si pierdo el sexto no pasaría nada". Sobre Olano hizo las necesarias precisiones: "Ahora es tamos iguales. Somos amigos. Seré feliz si gana Olano. Mi sueño es estar en un equipo que ha ganado el Tour. Poder contarlo". Así que con la introducción de Rominger, Olano lo tuvo más fácil. Su intervención fue contundente y demostró maneras en estas lides. Se expresa bien y sabe dejar muy claro lo que quiere decir. Atendió en italiano a varias preguntas y lo hizo con soltura. Otra cosa es el inglés. La televisión australiana le pidió unas palabras ante la cámara. "Diga, hola, soy Olano, Buenos días Australia", le pidieron encarecidamente. Y Olano que no. "Pero si es muy fácil, I am Olano". Que no. "Para un casero como yo no funciona esto de hablar en inglés", contestó. Así que lo dijo en castellano no sin mostrar una gran timidez ante la cámara.

Ante la prensa estuvo rotundo. "Estamos parejos, pero yo vengo del Giro y es más fácil que yo baje de forma. Hay dos opciones, pero en el momento crítico yo sabré lo que tengo que hacer. Tengo las ideas claras". A Olano le preguntaron si no e staba jugando al despiste: "No se si parece que juego al despiste, pero si hay que trabajar, trabajaré". Olano aceptó que se hable más de Induráin que de él, "por que Miguel tiene la opción de disputar el Tour y yo me estoy abriendo puertas".

Ambos aceptaron compartir fotos, cámaras y declaraciones, Ni una sola contradicción. Y un sólo objetivo: que uno de los dos suba al podio de París. Juan Fernández, su director, abundó en que no habrá ataques de parte de su equipo. "En todo caso, habrá ataques calculados. En el ciclismo moderno no cabe atacar desde el primer kilómetro".

Rominger y Olano. Olano y Rominger. Tanto monta, monta tanto. Habrá que seguir esta experiencia.