A la oposición no le gusta el whisky

La programación de Los Veranos de la Villa, que ayer presentó el concejal de Cultura, Juan Antonio Gómez-Angulo, no ha sido del agrado de la oposición municipal. Rafael Simancas, portavoz de Cultura por el grupo socialista, pone el énfasis en que las actuaciones de Los Veranos de la Villa estén patrocinadas por una marca de whisky (el Johnnie Music Festival está patrocinado por Johnnie Walker)."El gobierno municipal cae en la contradicción de, en una misma semana, alertarnos sobre las altísimas tasas de consumo de alcohol entre los jóvenes madrileños, mientras que patrocinan unas actuaciones dedicadas a esos mismos jóvenes con una conocida marca de whisky y otra de cerveza", expone Simancas. Para este concejal, Los Veranos de este año están marcados por la continuidad, la pobreza y la falta de imaginación. "Lo prueba el hecho de que las estrellas del programa son el cartel [obra de Ouka Lele] y el cine de verano", añade Simancas.

"La programación del 96 es parecida a la del 95, pero un poquito peor; igual que la del 95 era parecida a la del 94, pero peor. Cada año vamos dando un paso más en la mediocridad y alejándonos de lo que fue en su día esta ciudad: un símbolo para las vanguardias culturales y europeas", opina el concejal socialista Rafael Simancas.

Franco González, del grupo municipal de Izquierda Unida, opina que Los Veranos de la Villa son un negocio redondo para los especuladores de la cultura. "No hay Veranos ni derecho al ocio nada más que para unos cuantos privilegiados que pueden acceder a los recintos a precios abusivos", dice este concejal.

Para González, además, "se monta una operación especulativa que mueve cientos de millones que van a parar a los bolsillos de los promotores artísticos, empresarios de licores e intermediarios de cadenas de establecimientos de ocio que se nutren de los precios desorbitados de las entradas".