A Terry Venables:

Estuvisteis toda la víspera ensayando penaltis. Tú lo sabías, Terry. Me di cuenta desde el principio. No hay peor enemigo que un tipo impasible en el banquillo contrario, con ese aire de Smiley, de agente jubilado del M15. España era el mejor equipo inglés sobre el campo, alegrado con la rumba gitana y desgarbada de Kiko. Pero tú estabas ahí, controlando el guión, sembrando el campo de pistas falsas para alargar el desenlace. Te guardaste los caballos frescos para la prórroga, porque sabías que habría prórroga. Y cuando llegaron los penaltis, España se dispuso a librar, como siempre en la historia, un duelo trágico contra el destino, mientras tú, Terry, te limitabas a dar la fría orden de cerrar la operación.-