La Audiencia Nacional interroga a los etarras entregados por Francia

Cuatro de los siete presuntos miembros de la banda terrorista ETA entregados el sábado por las autoridades francesas al Gobierno español en la frontera acudieron ayer a prestar declaración ante la Audiencia Nacional. Tres de ellos forman parte del grupo de deportados expulsados tras encerrarse unos días en la catedral de Bayona y tienen pendientes causas con la Justicia española. También fue trasladado a la Audiencia el etarra Luis Iruretagoiena Lanz, puesto a disposición de España tras cumplir la condena que se le impuso en Francia y según un convenio de cooperación firmado por los anteriores Gobiernos de ambos países. Contra Iruretagoina no existen por el momento procesos judiciales pendientes, por lo que podría salir en libertad.Los tres deportados que prestaron declaración ayer en la Audiencia son José Ignacio Arruti Aguirre, de 36 años, que tiene pendiente una orden de busca y captura por detención ilegal y pertenencia a banda armada; Francisco Hernández Llamozas, de 39, con orden de detención firmada por el juzgado de instrucción número 2 de Madrid, y José Portu Espina, de 35, buscado por orden de la Audiencia Nacional por colaboración con banda armada.

Arruti está acusado de participar en un secuestro. Se encargó de custodiar a la víctima en compañía de José Antonio Aguirre Aristondo. Hernández fue detenido en 1982 en Andorra tras cometer un atraco contra Banca Roig en colaboración con otros cuatro etarras, por lo que fue condenado a 10 años, que cumplió en cárceles francesas. Portu intervino en 1984 en el lanzamiento de dos cócteles molotov contra un camión frances en Rentería (Guipúzcoa).