lrregularidades para dar y para tomar

Colegios en los que la votación comenzó con tres horas de retraso, falta de impresos oficiales para el recuento por los interventores e intimidación a éstos por los presidentes de las mesas -del partido gobernante- son algunas de las anomalías denunciadas por la oposición y de las que fue testigo este enviado especial dentro y fuera de Tirana.Las elecciones han reunido en Albania a unos 400 observadores internacionales. Hoy está prevista una declaración oficial de sus representantes. Ni Estados Unidos, primero y sobre todo, ni la Unión Europea tienen interés en hacer borrón y cuenta nueva.

Las primeras anomalías denunciadas ante la Comisión Electoral forzaron al presidente Berisha a prolongar por decreto en dos horas, hasta las diez de la noche, la apertura de los casi 5.000 centros de voto.

Resultados en unos días

La radio y la televisión estatales, controladas por el Gobierno, airearon -desde la mañana un rosario de acusaciones contra el Partido Socialista, único rival del Partido Democrático. La Comisión Electoral, inundada por denuncias, anunció por la tarde que "debido a las malas comunicaciones, los resultados oficiales deberán esperar probablemente hasta mediados de semana".En media docena de colegios recorridos por El PAÍS, las simples preguntas suscitaron incidentes. En Koder Kamez, al norte de la capital, este corresponsal fue expulsado tras solicitar permiso al presidente, con quien ya había conversado, para entrevistar al interventor socialista. Los delegados de los partido!, tenían prohibido por el jefe de la mesa hablar con nadie y carecían de silla.

En el colegio de Tirana Jeronim de Rada, el presidente, que se declaró ajeno a los partidos, hizo expulsar al interventor de la principal fuerza opositora tras declarar éste en voz alta que era notoria la afiliación de aquél al partido gobernante.

La opacidad y la intimidación eran idénticas en cada centro visitado, donde el presidente de mesa -siempre del partido de Berisha, pero negando su militancia- y un secretario llevaban la voz cantante. Como invitados de piedra, los interventores de, los partidos carecían de los utensilios imprescindibles. En muchos casos sin mesa, incluso sin los estadillos oficiales en los que los delegados ¿le los partidos tenían que anotar el recuento. En Vore, el interventor de la Alianza Democrática aseguró al periodista, en presencia del presidente "Somos 13 representantes de partidos y sólo hay dos impresos de recuento, que tiene el presidente de la mesa. Dicen que no hay papel".

Por la tarde, la Comisión Electoral, sobre la que llovían las denuncias, distribuyó fotocopias de los estadillos en vez de los impresos originales.