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El empeño del Canal en apurar los embalses preocupa a los pueblos "inundables"

Vicente G. Olaya

El Canal de Isabel II no dará vía libre a las aguas de sus 14 pantanos hasta que no alcancen el 97% de su capacidad total. Ayer se encontraban al 95,5%, y sólo cuatro grandes presas desembalsaban. Este empeño en apurar la capacidad de los embalses asusta a los pueblos próximos. Temen que tras tanto tiempo reteniendo, el agua, el Canal se vea obligado ahora a abrir las compuertas de par en par. El alcalde de Torremocha, Carlos Rivera, independiente, comenta: "La última vez que las abrieron fue en enero. La vega se inundó y no nos dio tiempo, casi a salvar los enseres".

A menos de un 1,5% del nivel considerado máximo por razones de seguridad (el 97%), la mayoría de las compuertas siguen cerradas. Cuando se abran, el nivel de los cauces subirá y podrá provocar algunas inundaciones en las vegas. uno de los pueblos. que más lo notará es Torremocha (302 habitantes). Este municipio, situado a los pies de El Atazar y El Vado, recibe en sus tierras la unión de los ríos Jarama y Lozoya. Carlos Rivera, su alcalde, se mostraba ayer preocupado. "El, pasado 22 de enero el Canal abrió las compuertas, el río se desbordó y causó graves daños. El agua se metió en las granjas dice. Un fax madrugador

El regidor se queja además de que los mecanismos de aviso son lentos. "¿Sabe cómo nos notifican que. van a abrir? Pues nos mandan un fax al Ayuntamiento a las cuatro. de la madrugada. Los funcionarios no llegan hasta las nueve.. Cuando leen el comunicado, el agua ya está en la vega".

Pilar Hernán, jefa del servicio de Protección Civil, minimizó las consecuencias del desembalse. "Todo dependerá de la cantidad de agua que se suelte. La situación no es preocupante porque se desembalsará poco a poco". Por ello, aún no se pondrá en marcha el llamado plan de inundaciones, un mecanismo que coordina las actuaciones durante las emergencias.

Desde ayer, los pequeños embalses de La Jarosa y Navalmedio (al 96,5% y 98,6% de su capacidad) suteltan agua sobre el Guadarrama. También, lo hacen la Pinilla (92,9%), Riosequillo (94,8%), Puentes Viejas (95,5%) y El Villar (97,1 %) que desaguan sobre El Atazar (95,5%), que retiene sus caudales. El líquido sube a un ritmo de 10 centímetros diarios por el muro de contención. Ya se encuentra a unos dos metros del borde.En lo que va de año, los embalses han vertido a los ríos unos 240 hectómetros cúbicos. Y todavía retienen 902, lo que Madrid es capaz de beberse en casi tres años.

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Sobre la firma

Vicente G. Olaya
Redactor de EL PAÍS especializado en Arqueología, Patrimonio Cultural e Historia. Ha desarrollado su carrera profesional en Antena 3, RNE, Cadena SER, Onda Madrid y EL PAÍS. Es licenciado en Periodismo por la Universidad CEU-San Pablo.

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