La banca condiciona el plan de Huarte a la entrada de un socio industrial

Tanto la banca acreedora como los proveedores y los obligacionistas de Huarte supeditan su apoyo al plan de viabilidad elaborado por la dirección de la constructora a la entrada de un socio industrial que aporte nuevos recursos económicos a la empresa en suspensión de pagos. La banca apuesta por la entrada de un nuevo socio y estaría dispuesta a liberar una línea de descuento comercial de 10.000 millones de pesetas para el pago de proveedores que permitiera el reinicio de las obras. Cortar la línea de descuento comercial a los proveedores fue el detonante para la suspensión de pagos del pasado 15 de marzo.La empresa alemana Hochtief, que es dueña del 30% de Pacsa, es la que cuenta con más posibilidades para entrar en la operación, aunque oficialmente no ha confirmado la operación. El miedo de la empresa alemana es encontrarse nuevas pérdidas encubiertas en Huarte tras los últimos acontecimientos.

Fuentes de la banca acreedora han señalado que las negociaciones para la entrada de un socio industrial se están acelerando en los últimos días. Los obligacionistas, a los que la empresa adeuda un total de 7.100 millones de pesetas, también se han mostrado partidarios del plan elaborado por el equipo directivo de Huarte, con Rafael Fernández a la cabeza.

El plan de viabilidad de Huarte establece una conversión de deuda bancaria en capital por valor de 7.494 millones de pesetas, de los que 5.695 millones son crédito puro y el resto son créditos hipotecarios. A los obligacionistas se les pide que capitalicen el 50% de su deuda, es decir, 3.560 millones de pesetas. A los proveedores se les solicita que capitalicen el 33% de sus deudas pendientes, lo que supone otros 10.000 millones de pesetas. A los trabajadores de la constructora se les ha pedido que conviertan en capital el 25% del salario bruto de los dos próximos años, lo que significa 4.000 millones de pesetas.