Aznar comunica a la dirección del PP que habrá investidura antes de que acabe abril

José María Aznar cree, según ha confiado al resto de la dirección del PP, que le bastarán dos semanas más para vencer las últimas resistencias de nacionalistas catalanes y vascos, resolver el problema central de la negociación con los primeros, la financiación autonómica, y poder desembarcar en La Moncloa antes de que acabe abril. El principal obstáculo sigue siendo el diseño de un modelo de financiación de los Gobiernos autónomos capaz de satisfacer las demandas de la Generalitat de Cataluña y que no represente disminución de ingresos o agravio para ninguna de las restantes comunidades

.El líder del PP y candidato a la investidura está decidido a tener montadas todas las piezas del rompecabezas para la cuarta semana del mes, a partir del lunes día 22, según ha confiado a algunos colaboradores. Fuentes de la dirección del partido confirman como fecha previsible para la votación en el Congreso los días 23 y 24 porque la negociación, afirman, va mejor de lo que parece". A fines del mes pasado, Aznar pronosticó que a mediados de abril tendría todas las piezas dispuestas. La Mesa del Congreso comienza a estudiar hoy la posible fecha, que fuentes de este órgano situaron también a partir del próximo día 22.

Aznar se reunió ayer con el resto de la cúpula del partido para poner fin a las breves vacaciones de Semana Santa y transmitió a sus interlocutores tranquilidad y optimismo, según uno de los asistentes. Fuentes de la dirección aseguran que las cosas "van mejor" en la mesa de negociaciones. de lo que pueden dar. a entender algunas declaraciones todavía reticentes de dirigentes de CiU y el PNV, sobre todo los primeros.

El equipo negociador del PP, encabezado por el vicesecretario general y hombre fuerte en el área económica, Rodrigo Rato, tiene previstas desde hoy nuevas reuniones con ambas formaciones. Para los populares, el trabajo en la mesa de discusión sigue avanzando, aunque aún existen obstáculos.

Recorte del gasto público

Una de las dificultades es el recorte del gasto público. Aznar y, Rato están decididos a mantener el compromiso de reducción del déficit al 3% en los Presupuestos Generales del próximo año, porque sin ese paso se convertiría en remota la hipótesis de que España pueda cumplir en 1998 los requisitos de la convergencia europea. Portavoces del PP, y en especial Rato, han insistido en los últimos días en ese objetivo.

Otra dificultad, siempre según fuentes de los populares, es la imposibilidad de llegar a soluciones bilaterales entre el Gobierno central y una comunidad autónoma, sin que los acuerdos surtan efectos generales. A este problema parecen responder las posiciones públicas de Manuel Fraga, presidente de la Xunta de Galicia, al respaldar el reconocimiento de los "hechos diferenciales", pero advertir a renglón seguido de que no pueden traducirse en situaciones de privilegio de unas comunidades sobre otras.

Además de la reunión de Aznar con el equipo de dirección, Rato mantuvo ayer por la mañana otro encuentro con los expertos que trabajan junto a él en la preparación de la próxima entrevista con los nacionalistas catalanes de CiU. Se trata, entre otros, de Cristóbal Montoro, portavoz del área económica en la anterior legislatura, y de Fernando Bécker, ex consejero de Economía de Castilla y León, ahora incorporado al área autonómica del partido bajo la batuta de Mariano Rajoy

Al término de la reunión, Rato reafirmó que la financiación autonómica no puede resolverse en un pacto bilateral, entre el Gobierno central y una comunidad autónoma, sino que concierne a todos y debe acordarse por consenso. El vicesecretario general del PP recordó que el vigente sistema sólo recibió el año pasado, en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, los votos favorables del Gobierno y de la Generalitat de Cataluña. El PP, según Rato, no va a incurrir en el mismo error y buscará "un consenso muy amplio", incluso con las comunidades gobernadas por el partido socialista -Extremadura, Castilla La Mancha y Andalucía- de las que aseguró que 11 son muy importantes y tienen mucho que decir y que aportar". De confirmarse la previsión de lo; populares, el nuevo Gobierno podría estar formado antes de que acabe abril. En 1993, el debate de investidura se inició el jueves 8 de julio, y duró dos días. El sábado 10, Felipe González tomó posesión ante el Rey en el palacio de la Zarzuela. El líder del PSOE se tomó el domingo de reflexión y no anunció la composición de su nuevo Gobierno hasta el lunes, 12.

Tras la publicación de los nombramientos en el BOE, los ministros tomaron posesión el miércoles 14 e inmediatamente se trasladaron al Congreso para asistir a la sesión solemne de apertura de la legislatura, presidida por don Juan Carlos. Los plazos podrían acortarse algo si Aznar decide anunciar la composición de su Gobierno nada más alzarse con la investidura.