Los españoles se quedan al pie del podio

El circuito de Sentul vivió ayer su primera fiesta seria, con más de 50.000 invitados. Entre ellos estuvo el presidente Suharto, uno de los principales impulsores de la construcción de un trazado destinado a albergar las pruebas más selectas, incluidos los grandes premios de motociclismo y fórmula 1, y sobre todo a desplegar la imagen de Indonesia por todo el mundo. Sin embargo, el desarrollo de la matinal no fue perfecto: a pesar de la voluntad y el esfuerzo de las autoridades y los organizadores, algunos defectos reflejaron su inexperiencia. Y encima, la presencia del presidente provocó el bloqueo de los accesos por parte de las fuerzas armadas.Esta vez los pilotos españoles no pudieron participar en la fiesta. No tuvieron nada que celebrar, aunque Crivillé y D'Antín se quedaron a punto. El noi de Seva superó el dolor de la mano izquierda para cerrar el primer periplo del Mundial bastante mejor de lo que esperaba hace unos días. "Es casi increíble", comentó Crivillé. "En una semana he pasado de estar, recién operado, en una cama de hospital a ser cuarto en una carrera de 500cc, muy cerca del vencedor. No he perdido la confianza y me he recuperado".

Crivillé acabó la prueba dolorido, igual que su perseguidor, Carlos Checa, que tuvo que correr infiltrado en la espalda a causa de su caída en los entrenamientos. "Sin embargo, estoy satisfecho, más que en Malaisia", dijo. "No he logrado estar en el podio, pero he rodado muy cerca de la cabeza durante muchas vueltas". Su compañero Puig también habló de su progresión: "Sí, cada vez me noto mejor aunque me cuesta coger el ritmo de carrera", explicó. "Espero que en Japón, en la próxima carrera [21 de abril], siga hacia adelante".

D'Antín estaba menos satisfecho. "El sábado fallamos en los reglajes y lo cambié todo, por lo que no estaba muy confiado al principio de la carrera. Sin embargo, acabar cuarto y estar tercero en el campeonato no es un mal resultado". De sus compañeros de 250cc, Sete Gibernau (Honda) fue l7º y José Luis Cardoso (Aprilia) sólo duró una vuelta y ya empieza a pensar que su moto no es tan oficial como le han dicho los responsables de la marca italiana.

También Aspar expresó su desesperación: "No sé qué hacer. Nada nos ha salido bien. Lo mejor, el resultado". Alzamora, por su parte, dijo: "La moto se me ha ido de delante, no he podido evitar la caída. Esperaba poder subir al podio, porque he arrancado bien y estaba con los mejores". Josep Sardá (Honda) se clasificó l9º y José David de Gea (Honda) se cayó.