La Audiencia Nacional intentará juzgar a Josu Ternera por vigilar personalmente a Amedo

La Audiencia Nacional intentará juzgar al ex número uno de ETA José Antonio Urrutioechea Bengoechea, Josu Térnera, encarceLado en Francia y que previsiblemente será entregado a España en mayo, cuando cumpla su condena de 10 años de cárcel por asociación de malhechores. La secretaria de Estado de Interior, Margarita Robles, reveló ayer que Ternera tiene una causa pendiente en España que, según fuentes de la Audiencia, se refiere al seguimiento, presumiblemente con fines terroristas, del ex policía José Amedo y del entonces director general del Ministerio de Industria, Eduardo Santos.

En declaraciones a la cadena SER, Margarita Robles reveló que Josu Ternera tiene una causa pendiente en España, "por la que tiene decretada la prisión provisional, aún cuando no se ha concedido la extradición y hay que ver qué valoración hacen los tribunales de esa causa pendiente y de cualquiera otra prueba que se pueda aportar o pueda existir".La causa contra Ternera, las diligencias previas 985 / 87, deriva de los papeles de ETA encontrados en Francia en la cooperativa Sokoa en 1986, por los que Josu Ternera fue procesado por el juez Carlos Bueren. Sin embargo, en medios jurídicos se considera que por estos documentos el entonces dirigente etarra no podría ser condenado en España, ya que el acusado vendría tras cumplir en Francia una sentencia de 10 años por un delito equivalente, el de asociación de malhechores.

Pero independientemente del caso Sokoa, Ternera está incriminado por otros documentos ocupados a Santiago Arróspide Sarasola, Santi Potros, en septiembre de 1987, en los que, según el fiscal, figuran datos precisos y detallados sobre personas contra las que la banda terrorista ETA pretendía atentar.

En primer lugar, hay una carta dirigida por Josu Ternera a Santi Potros en euskera en la que le comunica la dirección de un domicilio "para guardar a uno" y solicita "5 Kg." en pesetas; de éstos, "tres para Jarra¡ y dos para ASK".

Más concretamente, en una información manuscrita que se atribuye a Josu Ternera y que incluye una fotografía del entonces director de Industrias Siderometalúrgicas y Navales, Eduardo Santos, y la dirección y teléfono de éste, se especifica que el espiado solía ir a comer a "una marisquería con nombre gallego muy elegante".

Datos sobre Amedo

Otra información manuscrita atribuida a Josu Ternera, refeida al año 1987, indica que el ex policía José Amedo, implicado en el caso GAL, iba a tomar café diariamente entre las tres de la tarde y las 15.30 a un café de la plaza de Eguileor, en Bilbao. Seguía después otra información más detallada sobre el entonces subcomisario, en la que Ternera señala que ha podido comprobar "personalmente" los pasos de Amedo y en la que añade que "hacia las 11 se despide en la misma plaza de una rubia que debe tener alguna tienda y que es amiga suya".

Según Josu Ternera, Amedo se trasladaba después a un pub de la calle de Banderas, en Bilbao, donde permanecía hasta las doce. De allí iba a otro bar, "donde suele alternar con varias jóvenes". Entre otros detalles, agregaba que Amedo iba siempre "vestido de traje y corbata, casi siempre azul, y anda con bigote corto. Su foto ya salió en el periódico".

Según el fiscal, estos hechos constituyen en la actualidad un delito de asociación ilícita en su modalidad de dirección de banda terrorista, por el que pide para Urruticoechea 12 años de prisión y por el que en el momento de la calificación de los hechos, en 1993, interesó su prisión incondicional.

Antes de descubrirse esta causa, el ex dirigente de ETA fue investigado por los papeles de Sokoa, un sumarlo sobre las fuentes de financiación de la organización terrorista. El entonces juez central de instrucción número 1 de la Audiencia Nacional, Carlos Bueren, concluyó la instrucción a finales de diciembre de 1989. El que fuera jefe del aparato militar de ETA hasta su detención, el 11 de enero de 1989, fue procesado por presunta colaboración con banda armada junto a 55 personas más.

El caso Sokoa fue descubierto en noviembre de 1986, cuando la policía francesa localizó en los sótanos de una fábrica de muebles en Hendaya un arsenal de armas y numerosa documentación sobre las finanzas de ETA. Según las investigaciones realizadas tras hallarse el material de la cooperativa Sokoa, Josu Ternera era el firmante de numerosos documentos relativos a la financiación de la banda terrorista referentes a los gastos, cuentas y entregas de dinero. En uno de los autos dictados por el juez Bueren en noviembre de 1988 por esta investigación se señalaba que ETA recaudó 1.163 millones de pesetas entre 1980 y 1986 por el denominado impuesto revolucionario.

Por este motivo, las autoridades españolas cursaron en septiembre de 1990 una solicitud de extradición contra el ex dirigente de ETA. Ese mismo año, en el mes de octubre, Francia denegó la extradición al entender no compatible el delito de pertenencia a banda armada con el de asociación de malhechores, delito por el que finalmente fue condenado en Francia el 26 de diciembre de 1990 a 10 años de cárcel y a cinco años de prohibición de residencia en territorio francés a su salida de la cárcel. Los beneficios recogidos en el régimen carcelario posibilitarán a Ternera salir antes de cumplir la pena íntegramente.