INSÓLITAS DENUNCIAS
El gobernador civil de Pontevedra, José Álvarez de Paz, no sale de su asombro por algunas de las denuncias presentadas en las comisarías de policía de la provincia en los últimos días. En una de ellas una vecina de Pontevedra se queja ante la policía de que su marido "no funciona" como es debido y que no cumple con sus obligaciones conyugales. Otro vecino denunció a un amigo por haberle retirado el deber de saludo y un drogodependiente pide que la Guardia Civil le devuelva las dosis de heroína que se le incautaron tras haberlo atendido en un accidente de tráfico. José Álvarez de Paz ha evitado dar nombres, como el de un conocido narcotraficante que se ha querellado contra la policía por la vigilancia a que es sometido mediante el empleo de varios coches patrulla. El narco argumenta que es una intromisión en su vida privada. El gobernador, que en su día abandonó su condición de clérigo, aprovechó para recordar que este tipo de denuncias responden a lo que los obispos denominan "pérdida de la conciencia del pecado". Álvarez de Paz ha recibido cartas entrañables que guardará como recuerdo. En algunas de ellas se le trata como "jefe provincial del Movimiento".-
