Los mercados castigan con una fuerte caída la precaria victoria de Aznar
González se compromete a traspasar el poder de forma "serena y ordenada"
Los mercados bursátiles castigaron ayer con un fuerte derrumbe la precaria confianza depositada por los electores el pasado domingo en el proyecto político de José María Aznar. Lo pírrico del triunfo del PP, a 20 escaños de la mayoría absoluta y a tan sólo 1,37 puntos del ' PSOE, provocó un terremoto financiero. Las bolsas se derrumbaron (Madrid cayó 16,84 puntos, y Barcelona, 14,35), se esfumaron las posibilidades de una inmediata bajada del precio del dinero, y la deuda soportó una fuerte corriente de ventas. El presidente del PP, en su primera conferencia de prensa poselectoral, reconoció que la formación de Gobierno se le presenta "difícil".
Aznar admitió que el mundo financiero le exige que forme "rápidamente" un Gobierno estable y prometió intentar conseguirlo" cuanto antes". Tras sus pala bras, la Bolsa siguió bajando. El presidente del PP asumió públicamente que la única fórmula para llegar a La Moncloa pasa por pactos estables o acuerdos puntuales, en primer lugar con los nacionalistas catalanes, a los que pidió un "esfuerzo de responsabilidad".
Felipe González dejó claro ayer que sigue siendo presidente del Gobierno, aunque sea en funciones, e hizo un esfuerzo por transmitir serenidad a los mercados. González prometió una transición "serena y ordenada" y aconsejó a Aznar que mantenga la actual política económica para así poder cumplir los criterios de con vergencia con Europa. José María Aznar se mostró partidario de buscar fórmulas que le permitan mantenerse en La Moncloa cuatro años. "Me parece una irresponsabilidad la apuesta por una legislatura corta", aseguró. Los populares necesitan la colaboración de los 16 diputados de CiU y los 4 de Coalición Canaria.
El PSOE ya ha anunciado que votará en contra de la investidura de Aznar, mientras que CiU duda entre hacer lo mismo o abstenerse, si bien la coalición nacionalista en cabezada por el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, es partidaria de que el líder de la derecha forme Gobierno. Aznar y Pujol mantuvieron ayer una primera conversación. Rodrigo Rato, responsable in péctore de Economía en un eventual Gabinete popular, ha recibido el encargo de abrir conversaciones con los nacionalistas catalanes y vascos.
Editorial en la página 12
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