Garzón dice que HB hace "demagogia siniestra"

El juez Baltasar Garzón confirmó ayer la prisión provisional eludible mediante el pago de una fianza de 300 millones impuesta al portavoz de HB, Jon Idígoras, por un delito de colaboración con banda armada presuntamente cometido por la difusión de un vídeo de ETA. En el auto dictado ayer por el magistrado se dice que HB hace "mera demagogia siniestra" cuando habla de democracia y de libertad, porque "precisamente busca impedir al ciudadano ejercer su derecho libremente".El juez rebate todos los argumentos expuestos por los abogados de Idígoras en su recurso y señala que el procedimiento abierto no persigue "ni la ilegalización de Herri Batasuna ni criminalizar sus opiniones políticas. No puede confundirse lo que es la comisión de un delito", precisa el documento, "con lo que es la defensa de una opción política independentista ( ... ) que puede llevarse a cabo y discutirse dentro de los cauces democráticos y legales( ... ), y ello no puede ni debe criminalizarse por muy en desacuerdo que pueda estarse con dicha opción".

Lo que se persigue, según el magistrado, es "la ejecución de un concreto hecho delictivo, cometido presuntamente por los corresponsables de un determinado partido".

Señala el auto que los miembros de la Mesa Nacional de HB son los que de mutuo acuerdo han decidido, utilizando la formación política a la que representan y de acuerdo con la organización terrorista, prestar la Voz a ETA, promocionar y editar los vídeos asumiendo sus postulados y defendiéndolos y tratar de imponerlos a través de medios de difusión.Mensaje de coacción

El juez señala que HB y ETA pretenden "transmitir a los ciudadanos convocados a una consulta electoral ( ... ) un mensaje de coacción y amenaza a través de la distribución y exhibición del material videográfico que pretende influir, para- disminuirlas, en las condiciones de autonomía y libertad necesarias para ejercer el derecho al voto transmitiendo los postulados ilícitos que la organización terrorista persigue".

El mensaje de los vídeos es calificado de delictivo y el juez ironiza sobre el "mensaje democrático" al que aludían en el recurso los abogados de Idígoras, señalando que "se da por unos encapuchados en nombre de ETA, bajo el anagrama de esta organización y con las pistolas encima de la mesa o en la cintura".

El juez destaca que no se puede hablar con mínima seriedad y rigor de una alternativa democrática ofrecida por una organización terrorista como ETA. Los abogados de Idígoras prescinden "de forma olímpica y hasta cierto punto cínica, de algo esencial y es que ( ... ) ETA mata, extorsiona, secuestra, roba, coacciona y amenaza a ciudadanos indefensos, daña intereses privados y públicos, ataca el orden constitucional y persigue la destrucción del estado Español".