ZAMBOMBAZO
El decano del Colegio de Abogados de Segovia, Manuel González Herrero, ha reivindicado que los gigantes y cabezudos de las ferias de Segovia vuelvan a utilizar las zambombas, unos elementos construidos a base de tripa de cerdo hinchada, sujetos con un palo, con los que estos personajes atemorizaban a los niños en sus pasacalles. La propuesta se la hizo llegar personalmente al alcalde segoviano, Ramón Escobar, en presencia de otras autoridades, como la ministra de Sanidad, Angeles Amador, durante la entrega del Premio Nacional de Folclor Agapito Marazuela a Mariano San Romualdo, conocido por Silverio, un dulzainero de 81 años que comenzó su actividad cuando contaba con 11 y que durante más de medio siglo ha ido acompañando con su música a los populares gigantones. El acto de entrega se celebró en la iglesia románica de San Quirce, sede de la antigua Universidad Popular segoviana, fundada por intelectuales como Antonio Machado, Blas Zambrano y Mariano Quintanilla, mientras que no faltaron las coplas del cancionero de Marazuela, recogidas en sus viajes por los pueblos castellanos, interpretadas por el folclorista vallisoletano Eliseo Parra.-
