Indignación judicial contra el intento de Estevill de investigar juzgados catalanes

Los jueces barceloneses han decidido movilizarse ante la petición del vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Luis Pascual Estevill, que pretende investigar una decena de juzgados, entre los que se encuentran algunos que instruyen demandas que le afectan personalmente. El presidente del Tribunal Superior de de Cataluña, Guillem Vidal, dirigió ayer un escrito al presidente del CGPJ en el que le manifiesta su sorpresa, "malestar y preocupación" por la maniobra.El escrito de la primera autoridad judicial catalana califica de "inspección extraordinaria" el intento de Pascual Estevill de meter la nariz en la sala contencioso administrativa del TSJC -que es responsabilidad directa de Guillem Vidal- y en una serie de juzgados. Vidal destaca que la medida "no cuenta con el respaldo de los otros dos comisionados del CGPJ para Cataluña (Ana Pérez Tórtola y Joan Antoni Xiol Ríos). "Ignoro la finalidad de esta petición para investigar de forma tan selectiva", expone Guillem Vidal, que considera necesario "significar que esos juzgados fueron inspeccionados muy recientemente".

Los motivos alegados por Estevill para inspeccionar estos juzgados, "anomalías contables" o retrasos excesivos, contrastan con las inspecciones ordinarias que superaron en 1994 y 1995."Venganza"

Los jueces afectados pidieron ayer a Santiago Torres, decano de la Junta de Jueces de Barcelona, una reunión para tratar el asunto, que consideran podría tratarse de "una venganza" ya que entienden que el vocal no tiene competencias para reinspeccionar juzgados. En ese sentido, recuerdan el precedente similar protagonizado por otro vocal del CGPJ, Javier Gómez de Liaño.

Estevill pidió que se investiguen juzgados relacionados con las causas por prevaricación que instruye el Supremo, como es el caso del 10 de instrucción, cuyo titular es Ramon Masiá.

El vocal del Poder Judicial a instancias de CiU, también pidió la investigación de los retrasos de las salas de contencioso-administrativo, donde se acumulan 25.000 causas pendientes, a pesar de conocer los esfuerzos de Guillem Vidal por reforzar el personal de esas salas y la decisión que estaba a punto de tomar el CGPJ -y que se acordó finalmente ayer- de reforzar con cinco magistrados las salas de contencioso-administrativo colapsadas.

Estevill, imputado en varias diligencias por presuntos delitos de prevaricación y por un delito fiscal, ha recibido otro varapalo, precisamente en uno de los juzgados que pretende investigar, el número 1 de Instrucción, encargado del caso Grand Tibidabo, que afecta a Javier de la Rosa. El juez titular, Joaquín Aguirre, ha decidido archivar una denuncia del hijo de Pascual Estevill contra Enrique Marugán, el primer caso de prevaricación que abrió la Sala Segunda del Supremo. En la denuncia se sostenía que Marugán había incurrido en denuncias falsas. Pascual ha recurrido.