El PP deja una puerta abierta a la reiserción de etarras

El Partido Popular deja una puerta abierta en su programa electoral a la reinserción de condenados por delitos de terrorismo, si bien circunscrita a "los reclusos que acrediten una voluntad de cooperación efectiva con la Justicia". Los populares se proponen reformar el Código Penal, recién aprobado con su abstención, de forma que los terroristas -y los narcotrafícantes- "cumplan íntegramente" sus condenas.Según el nuevo Código Penal, que entrará en vigor el 24 de mayo, en ciertos casos de condenas muy amplias los jueces podrán fijar en la sentencia el computo del tiempo transcurrido a efectos de beneficios penitenciarios y libertad condicional sobre el total de la pena y no sobre el máximo de 30 años de cumplimiento. Condenas superiores a 100 años, frecuentes en casos de terrorismo, desembocarían siempre en 30 años de prisión.Sin embargo, se deja abierta la posibilidad. de. que el juez de vigilancia penitenciaria decida más adelante devolver al preso al régimen general, es decir al cálculo sobre el máximo de 30 años. Esta posibilidad es, lo que el PP ha anunciado que eliminará.Los beneficios penitenciarios que subsisten en el Código están orientados a facilitar la reinserción: permisos temporales, progresión de grado hasta el tercero (que incluye la posibilidad de acudir a la prisión sólo a pasar la noche) y libertad condicional, fundamentalmente.Hasta ahora, los pronunciamientos contrarios a la reinserción de los terroristas realizados por muchos de los dirigentes del PP se han caractérizado por un tono rotundo, carente de matiz,. sugerente incluso de una especie de pena de mazmorra contraria a la Constitución.Jaime Mayor Oreja, el presidente del partido en el País Vasco, puntualiza que el PP admite la reinserción -con carácter individual, límites claros y exclusión de los delitos de sangre en los casos en que se acredite una manifiesta voluntad de colaboración con la Justicia por parte del afectado.Según Mayor Oreja, las críticas populares no se centran en la reinserción en sí, sino en cómo la han aplicado los socialistas. Para él, muchos de los activistas de ETA beneficiados y, por tanto, en libertad, difícilmente acreditan el perfil técnico del reinsertado.

En su opinión, hay que demostrar al ámbito de ETA y a sus presos y familiares que la reinserción, el cambio de grado y la excarcelación no están garantizados, y que sólo se puede acceder a los mismos mediante un rechazo inequívoco a la organización criminal y colaborando con la justicia.