CC OO inicia hoy un congreso marcado por la división y la pugna entre dos modelos sindicales

El pulso mantenido durante estos cuatro años por los dos sectores de Comisiones Obreras llega hoy a su fase decisiva. Los 1.001 delegados del VI Congreso Confederal deben decidir cuál es el respaldo que tiene cada uno de esos sectores y cuál es la estrategia que aplicará la central hasta el año 2000. En este congreso, marcado por la división se enfrentan dos modelos sindicales: el liderado por el secretario general, Antonio Gutiérrez, que apuesta por una total autonomía respecto a los partidos, y el encabezado por Agustín Moreno, que propone "una alianza con sectores progresistas" políticos y sociales. Gutiérrez cuenta con un apoyo inicial del 65% y Moreno tiene un respaldo en torno al 35% de los delegados.

Prácticamente en todos los congresos de CC OO se han presentado tres o cuatro listas a la dirección. En el que se inicia hoy en Madrid, habrá también dos candidaturas alternativas pero es la primera vez en la que se enfrentan dos modelos sindicales bien diferenciados y pon un amplio apoyo. Además de las discrepancias que les separan respecto a la autonomía de los partidos, conjugan de forma diferente el binomio negociación-movilización. Para Antonio Gutiérrez, el objetivo es que todo el esfuerzo de lucha que se pide a tos trabajadores con las movilizaciones "pueda fructificar en más acuerdos de los que hemos tenido hasta ahora", con el Gobierno y con las patronales. Para el sector de Agustín Moreno, el sindicato ha pecado de pasividad ante las agresiones del Gobierno y apuesta por una movilización más sostenida.Junto al modelo sindical que regirá el sindicato hasta el año 2000, en este congreso se debe decidir asimismo el equipo de gobierno que aplicará las resoluciones en el día a día. Los órganos de dirección serán plurales, pero la gestión no. Es decir, los dos sectores estarán representados en la ejecutiva en función del porcentaje de apoyo que obtengan de los delegados, aunque, la intención del sector mayoritario es controlar todas las secretarías de la dirección. El sector minoritario quedará relegado a las vocalías, sin ninguna responsabilidad concreta.

Con esos criterios, Gutiérrez ha conformado la lista que presentará al congreso con el que iniciará su tercer y último mandato en el caso de ser reelegido. José María Fidalgo, secretario de Relaciones Institucionales, ejercerá de número dos y Fernando Puig, un hombre muy cercano a Fidalgo, ha sido elegido por Antonio Gutiérrez para sustituir a Agustín Moreno al frente de la secretaría de acción sindical. El resto de la dirección lo componen: José Manuel de la Parra (Organización), José María Díaz Ropero (Finanzas y Servicios), Juan Moreno (Internacional), Angel Campos (Comunicación), Julián Ariza (Estudios), Joaquín Nieto (Medio Ambiente y Salud Laboral), Lola Liceras (Empleo), Blanca Gómez (Formación), María Jesús Vilches (Mujer) y José Luis Sánchez (Juventud).

La lista que presentará Moreno no se cerrará hasta el último momento -la tarde de mañana jueves- y una vez la comisión de candidaturas proponga al plenario la cifra definitiva de miembros de la futura ejecutiva. Pueden ser 19 ó 20 y ello dará opción al sector crítico a tener seis o siete representantes. En todo caso, la lista alternativa estará encabezada por Agustín Moreno, Salce Elvira (actual secretaria de Empleo) e Iñigo Echenique (dirigente de Enseñanza).