El Parlamento andaluz cierra la legislatura más corta de su historia con alegría en el PP y desazón entre los socialistas

El Parlamento andaluz puso ayer fin a la cuarta legislatura, la más corta de su historia (sólo ha durado 18 meses), con la aprobación de la ley de Comercio sacada adelante con los votos de todos los grupos. Los diputados acogieron de forma dispar el cierre de la Cámara: hubo alegría en las filas del PP, jaleada por los buenos datos de las encuestas, y desazón en las del PSOE e IU.El último pleno estuvo marcado por el interés de todos los parlamentarios en saber qué puestos ocuparán en las candidaturas para las elecciones autonómicas del 3 de marzo y por la incertidumbre del resultado. "Que los andaluces repartan suerte", fueron las últimas palabras del presidente del Parlamento, Diego Valderas, al cerrar la sesión.

La valoración de los dirigentes políticos sobre el año y medio de trabajo parlamentario no difirió de los argumentos escuchados en ese tiempo. Los socialistas perseveraron en sus quejas de la pinza de conservadores e IU; los populares insistieron en la incapacidad de la izquierda en general y del PSOE en particular para gobernar, y los de IU reiteraron que ha sido mucho Parlamento para tan poco Gobierno.

Sólo los populares mostraron alegría por el fin de la legislatura, alentados por la victoria que le dan sus encuestas en Andalucía. "Afortunadamente ha terminado", dijo el presidente regional del PP, Javier Arenas, quien afirmó que la comunidad ha estado un año sin Gobierno. El dirigente popular no entró a valorar la acción del Ejecutivo andaluz porque "no ha existido", y estimó como positivo el fin de la mayoría absoluta.

De modo similar se expresó Luis Carlos Rejón, coordinador de IU, que no asistió al último pleno al estar en precampaña en Almería. Rejón negó que se haya bloqueado al Ejecutivo y se quejó de que éste no haya estado a la altura de las circunstancias.

La opinión del presidente de la Junta, Manuel Chaves, fue la contraria. A su juicio, la cuarta legislatura ha estado marcada por el "pacto cobarde" de PP e IU, el cual, según dijo, ha deteriorado las instituciones, incluida la propia asamblea legislativa.