Derribadas dos chabolas de 10 magrebíes en Majadahonda
Sin techo y bajo la lluvia. Así quedaron los 10 magrebíes que ocupaban las dos Ias chabolas que el Ayuntamiento de Majadahonda (39.000 habitantes) derrumbó el jueves en el poblado del Arroyo de la Grajera. La concejal de Servicios Sociales, Leonor Fernández, del PP, negó tales derrumbamientos y dijo que se había tirado una chabola en estado ruinoso "con autorización judicial y para hacer una limpieza".La flota de vehículos municipales se presentó en el poblado chabolista poco antes de las nueve. Se componía de dos máquinas pesadas para tirar las favelas y dos camiones para la recogida de los escombros. Actuaron con rapidez, en una hora tiraron las chabolas y recogieron los restos despedazados. Les escoltaban tres coches patrulla de la Policía Local. Uno de los agentes imposibilitó la labor del reportero de EL PAíS cuando iba a hacer fotos. El policía le sujetó del cuello y del brazo y le puso contra el coche patrulla para registrarle. El agente le retuvo hasta que los vehículos municipales abandonaron el lugar.
Los marroquíes se quejaban el jueves del proceder del Ayuntamiento: "Vaya día que han elegido para tirar las chabolas. Ni siquiera nos han enseñado la supuesta orden judicial y no nos habían avisado", se lamentaba Alí, inmigrante chabolista. Los eis ocupantes de una de las chavolas derruidas se encontraban en esos momentos en el pueblo buscando trabajo. "Cuando vuelvan verán que lo han perdido todo. Tenían todas sus pertenencias dentro", añadió un marroquí testigo del suceso.
El Ayuntamiento tiene cuatro órdenes judiciales de fecha 7 de noviembre que autorizan la demolición de otras tantas chabolas.
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