Bach y padel

"Yo nunca he dicho que quiero que mi gestión sea wagneriana. Ahí se equivocó' usted. No me gusta Wagner. Entre nosotros, y en tono- de broma, le diré que Wagner es ruido", dijo sonriendo el nuevo rector al periodista.En un rincón suena Radio 2; la emisora que ininterrumpidamente programa música clásica. "Sí; soy un melómano histórico. Pero me gusta Bach, no Wagner. Dije que la gestión debe ser sólida como la obra de Bach. También me gustan muchísimo Vivaldi y Hándel. Y Mozart. Una de las, cosas que quiero impulsar en la Universidad es el amor a la música que los estudiantes la conozcan", añade Puyol, que hablando de esto se dispara: ¡Y una de mis, ideas más queridas es, crear un conjunto de cámara propio de la Complutense!". Le frena un proverbial pragmatismo fruto de la experiencia de haber desempeñado durante ocho años el cargo dé vicerrector de Ordenación Académica: "Claro, que hay que hacer antes muchas cosas más necesarias

Otra de las aficiones del nuevo timonel de la Complutense, nacido en Gijón hace 50 años, catedrático de Geografía Humana, casado y con cuatro hijos, es el padel (especie de tenis reducido y acotado por paredes). También le atrae la lectura: en su mesilla, esta noche, reposará El amor en los tiempos del cólera, de García Márquez.