Tapie reconoce haber mentido y pide clemencia para no ir a la cárcel

Bernard Tapie estrenó ayer, ante el Tribunal de Justicia de Douai (norte de Francia), su nueva imagen. El ex ministro, ex financiero y ex dirigente futbolístico compareció con una desconocida humildad ante el juez que debía resolver su apelación contra una condena a dos años de cárcel por amañar un partido en 1993. Y, por primera vez, reconoció haber mentido al negar haberse entrevistado con Boro Primorac, entrenador del Valenciennes, poco después del encuentro de liga comprado que había enfrentado a ese equipo con el Olympique de Marsella (OM)que entonces presidía Tapie.El acto de contrición fue formulado, sin embargo, con el estilo contundente del antiguo Tapie: "Le digo humildemente, señor presidente [del tribunal], que soy un gilipollas, no lo haré nunca más. Mi defensa no se sostenía". Tapie reconoció haber hablado con Boro Primorac el 17 de junio de 1993. El 20 de mayo de ese año, el OM había vencido por 0-1 al Valenciennes, en un partido que fue arreglado (el OM sobornó a los principales jugadores de su rival) para que los marselleses se adjudicaran matemáticamente el título de Liga y pudieran disputar con tranquilidad la final de la Copa de Europa, que ganaron también 0-1 frente al Milan.

Según la acusación, Tapie habló con Primorac para urdir una coartada conjunta frente a las sospechas de soborno a jugadores que ya empezaban a difundirse. Tapie reconoció al fin la veracidad de la conversación con el entrenador, pero negó que hablaran del partido Valenciennes-OM.

Tapie reconoció el domingo que se sentía "aterrorizado" ante la idea de ser encarcelado. Y su miedo tenía fundamento. Su actual apelación a la sentencia que le condenó a dos años de cárcel, de ellos uno en firme, por "corrupción activa y falso testimonio", cuenta. en principio con pocas posibilidades de éxito.

Por otra parte, el entrenador de fútbol croata Miroslav Blazevic, acusado de participar en los bajos fondos de la política del Olympique de Marsella durante el reinado de Bernard Tapie, se encuentra desde el pasado viernes en manos de la justicia francesa, informa desde Ginebra Ana Fernández, ciudad suiza donde fue detenido.